¡Qué bueno está el miajón del pan mojado en la yema de un huevo frito o de un suculento bocata de pan calentito con jamón de Montánchez! Ibérico claro. Se dice que el pan es "el más delicioso manjar" que jamás se ha elaborado, pero... ¡Qué lástima, engorda!. Es por esto que el pan, alimento y nutriente fundamental en nuestra dieta, ha sido el protagonista por segundo año de la campaña Pan cada día que informará a la población de su "injustificada fama en el control de peso y de que es un alimento saludable".
Nutrientes como los hidratos de carbono, fibra, vitaminas, proteínas y los minerales forman parte de la vida de los más panaderos de la familia y, deberían también, formar parte de la de todos, tal y como aconsejan los expertos. En concreto, esta acción pretende, mediante la distribución en la región de 20.000 bolsas de papel a modo de díptico, y medio millón en toda España, informar de que "el pan es un elemento esencial en una dieta sana y equilibrada, además de romper con el falso mito de que engorda", según explica la doctora Carmen Gómez Candela, Jefa de la Unidad de Nutrición del Hospital de La Paz de Madrid y portavoz de la campaña.
En el reverso de estos paquetes, todo aquel que se acerque a comprar a una panadería, podrá leer mensajes sobre pan y salud y cantidades recomendadas por los expertos.
Para el consumidor
La campaña Pan cada día está enfocada al consumidor que "no alcanza hoy en día el consumo mínimo de 200 y 250 gramos diarios repartidos en las diferentes comidas", apunta la doctora Gómez.
Es más, advierte que "ante el preocupante descenso del consumo de pan hay que informar sobre su valor nutricional y lo beneficioso que es para una dieta sana, además de romper falsos mitos".
Sin embargo, según los datos publicados por Mercasa referentes al 2007, el consumo de pan en el hogar de los extremeños es "menos alarmante", ya que, "el consumo se sitúa en 68,3 kilos por persona y año, con 42 kilos por encima de la media, siendo la comunidad que más pan consume".
En cuanto a las dietas de control de peso, la doctora Marcela González Gross, también portavoz de la campaña, sostiene que "el pan no contiene grasas y consumido con normalidad no engorda con unos 100 de gramos al día".
El pan es uno de los alimentos más tradicionales que contribuye a nuestro bienestar. Sin embargo, los españoles estamos cambiando el consumo de pan por alimentos menos saludables. En una dieta equilibrada, el 50% de la energía necesaria para nuestro organismo debe provenir de los hidratos de carbono.
El pan aporta vitaminas del grupo B, esencial para los tejidos del cerebro y del corazón, contiene también minerales como fósforo, magnesio, calcio y potasio. Una ración de 100 gramos de pan blanco aporta 19 miligramos de calcio para la formación de los huesos y dientes y 91 de fósforo (195 el pan integral). Por su parte, el magnesio se encarga del transporte de la energía, y el potasio, en el que el pan integral es especialmente rico, controla el ritmo cardiaco.
Los últimos datos de consumo de pan en España reflejan un descenso en el 2007, con 52 kilos per cápita, dos menos que en el 2006. Se trata de una cifra considerablemente inferior a la cantidad de pan consumida en las últimas décadas (134 kilos en 1964, por ejemplo, o casi 70 en los años ochenta). También es menor a la consumida por los italianos, con 75 kilos, y por los franceses, con 70. En definitiva, comer pan es sano, y además, ¡está buenísimo!.
