Las 15 cooperativas agrarias que forman parte de Acopaex participarán en la producción de combustible biológico en la región, de acuerdo con el convenio que ayer firmaron sus responsables y la empresa Bioenergética Extremeña con la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente de la Junta. De esta forma, entre ambas organizaciones impulsarán y desarrollarán cultivos bioenergéticos para la obtención de biodiésel y bioetanol.

Según explicó el titular de la consejería, José Luis Quintana, las dos entidades pondrán en marcha proyectos enfocados a la producción de combustibles ecológicos, lo que contribuirá a "la creación de empleo, riqueza, estabilidad y seguridad en el sector agrícola extremeño", ya que aumentará la superficie dedicada a este tipo de cultivos y se abrirán "nuevas oportunidades" para los agricultores, que además de alimentos también podrán generar energía.

Quintana también destacó que la obtención de biodiésel y bioetanol en Extremadura servirá para impulsar los nuevos sistemas de producción de energías alternativas, de forma que se contribuirá a minimizar el impacto del cambio climático.

EN FASE EXPERIMENTAL En estos momentos, según detalló Domingo Fernández, presidente de Acopaex, la asociación dispone de 50 hectáreas dedicadas a pruebas con cultivos bioenergéticos, aunque esperan poder duplicar la superficie de cara a la próxima campaña. Concretamente, están experimentando con la colza, la soja y el sorgo, que permiten "mayor adaptación y mayor rendimiento". Asimismo, ya están realizando las primeras pruebas con jatropa, una planta de origen indio que produce un fruto parecido a la nuez y que tiene la ventaja de que dura varios años, por lo que no es necesario sembrarla anualmente. En este sentido, asegura que se trata de una "alternativa de futuro" para el campo extremeño, teniendo en cuenta "las importantes primas que van a llegar desde la Unión Europea en los próximos años".

El acuerdo además servirá para que las 15 cooperativas asociadas a Acopaex puedan disponer de depósitos propios de biodiésel y bioetanol con un combustible "a un precio más barato" que en el mercado. De esta forma, según Domingo Fernández, los agricultores podrán "dar salida" a una parte del cultivo y consumir lo que que producen sus instalaciones.

Las plantas de producción estarán localizadas en el municipio pacense de Valdetorres, una decisión que se ha tomado porque "tiene apartadero propio de ferrocarril, está bien comunicada con las autovías y dispone de acceso adecuado al agua a través del canal del Zújar", explicó el representante de Bioenergética Extremeña, Diego Bigeriego. La de biodiésel, en la que se han invertido 42 millones de euros, se pondrá en marcha en agosto, mientras que la planta de bioetanol está pendiente del expediente de calificación de la Consejería de Medio Ambiente para iniciar su construcción, a la que se destinarán 80 millones.