El consejero de Agricultura, José Luis Quintana, aseguró ayer que cinco sectores agrarios --tabaco, arroz, cereales, ganadería y olivar-- pueden tener problemas a cuenta de la reforma de la PAC, ya que, a su juicio, se intenta hacer pagar a los agricultores "la crisis política de la UE, porque los intereses nacionales están ganando la batalla a los principios que inspiraron la creación de la unión".

Según explicó en las jornadas técnicas de Acorex, "el desacoplamiento es una trampa, para dar argumentos a los que propugnan la desaparición de las ayudas, porque, sino se produce, ¿para qué seguir pagando?".

En el mismo sentido, criticó que Bruselas autorice ayudas nacionales a los agricultores, "porque eso es el fin de la PAC, del principio de solidaridad, y beneficiará a los Estados ricos con poca gente dedicada al campo".

En su análisis sectorial, el consejero mostró su solidaridad con los tabaqueros y mostró su deseo de que la reforma "que es el fin de cultivo" se frene en el Parlamento Europeo. Respecto al olivar, aseguró que el desacoplamiento de ayudas "perjudica a las zonas de baja producción".

Asimismo, ratificó que la Junta impugnará la regionalización del arroz, "y ganaremos, como ganamos con el maíz", y explicó que los cambios para la ganadería "acabarán con el 50% del ovino extremeño". Por último, explicó que si se paga aún sin cultivar cereal, se terminará por no sembrar, y el precio del pienso se incrementará.