La recaudación tributaria del Estado en Extremadura va camino de alcanzar en 2016 su máximo histórico. Hasta el mes de noviembre, los ingresos tributarios en la región se situaban en 1.212,1 millones de euros, casi igualando ya la cifra que se obtuvo en el ejercicio completo del 2015 (1.222,7 millones) y también muy cerca de los 1.246,3 millones de euros percibidos en todo el 2007, anualidad que hasta ahora marca el tope de toda la serie histórica, que arranca en 1999.

Teniendo en cuenta que en diciembre del año pasado la recaudación del Estado fue de 87,3 millones de euros, y que en igual mes del 2014 se situó en 65,8 millones, parece más que probable que se acaben sobrepasando ambas cifras. Al menos en términos nominales. Si se tienen en cuenta los efectos de la inflación, el 2016 apunta a convertirse en el segundo mejor ejercicio para los ingresos del Estado, quedándose únicamente por debajo del 2007, justo antes del inicio de la crisis, ya que entre enero de ese año y noviembre del 2016 el IPC ha aumentado un 15,9% en la región.

De acuerdo al último boletín mensual de la Agencia Tributaria, entre enero y noviembre del 2016 los ingresos tributarios aumentaron en la región un 6,8% respecto a los mismos once meses del 2015, bastante por encima del incremento que se experimentó en el conjunto del país, que fue del 2,8%. De entre las comunidades del régimen común (todas a excepción de País Vasco y Navarra), solo en tres hubo un auge mayor que en Extremadura. Se trata de Murcia, con un 16%, Baleares, con un 14,7%, y La Rioja, con un 7,4%. Tras esas mismas autonomías y Castilla-La Mancha, la extremeña fue la quinta región con un mejor comportamiento en el mes de noviembre, con una subida del 7,8%, hasta totalizar 82,5 millones de euros. A nivel nacional, en cambio, hubo una disminución del 3,6%, con 11.684 millones recaudados. En el informe de la Aeat se puntualiza que la caída se produce «a pesar» del aumento de los ingresos brutos de un 3,7% y «como consecuencia del fuerte incremento» de las devoluciones realizadas, que crecen un 36,6%.

Volviendo a los datos del acumulado del año en Extremadura, el impuesto que supone un mayor volumen de ingresos, el IRPF, había aportado hasta noviembre a las arcas públicas 602,2 millones de euros, un 5,1% más que en el 2015. Por contra, en el conjunto del país se experimenta una ligera caída del 0,2%.

EVOLUCIÓN por semestres / En este sentido, el informe subraya los efectos que ha tenido la reforma de este impuesto en los dos últimos años, que ha hecho que la evolución sea muy distinta entre la primera parte del 2016, en la que se observaron descensos en los ingresos por la rebaja de tipos de comienzos de año, y la segunda, con un crecimiento de la recaudación al compararse con un periodo del 2015 afectado por una disminución adicional de los tipos. En el caso de Extremadura, hasta el mes de junio se arrastraba una disminución del 2,4%, por un -4,7% en el total nacional. «Las rentas de las familias, en cambio, están mostrando una tendencia creciente en lo que va de año impulsadas por la mejora del empleo, el crecimiento estable de la masa de pensiones y los buenos resultados en las rentas empresariales», se añade desde la Aeat.

Especialmente llamativo fue el comportamiento que se experimentó en lo percibido en concepto de Impuesto de Sociedades, que en la comunidad autónoma aumentó casi en un tercio (30,1%) respecto al 2015, un auge muy por encima del estatal (10%). En solo tres ejercicios la recaudación por este tributo que grava los beneficios de las empresas se ha duplicado en Extremadura, una vez que entre enero y noviembre del 2013 apenas si fue de 77,9 millones de euros.

De los principales impuestos, el único que baja el importe recaudado en la región hasta noviembre es el IVA. Lo hace en un 2,6%, mientras que en España este gravamen vinculado al consumo contabiliza un alza del 4,3%.