La Sala de lo Contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx) ha vuelto a rechazar la recusación del magistrado de dicha Sala, Mercenario Villalba Lava, formulada por la Junta de Extremadura, y además impone una multa a la Administración autonómica. El tribunal argumenta que las recusaciones lo han de ser para supuestos concretos y determinados y que las expresadas manifestaciones de voluntad, aún cuando fueran ciertas, que lo son, "no son legalmente relevantes".

Según informó ayer el Ejecutivo regional, la recusación fue formulada como consecuencia de la carta aparecida en un diario regional el 21 de enero del presente año, en la que un abogado de Badajoz denunciaba públicamente las manifestaciones de Mercenario Villalba Lava respecto a "ser contrario ideológicamente al PSOE" y hacer valer que "él controla al Ejecutivo, pero el Ejecutivo no le controla a él".

IMPARCIALIDAD

El Gobierno regional instó la recusación de dicho magistrado al entender que, siendo el PSOE el que sustenta a la Administración autonómica, "resulta evidente que no goza este magistrado de la necesaria imparcialidad para conocer y resolver de los asuntos en los que se cuestione la legalidad de la actuación de la Junta".

Además, añade que "no solo no les otorga tal carácter sino que, al hecho de acudir a los tribunales ante tales aseveraciones, solicitando el amparo de la justicia, lo califica de mala fe e impone, por ello, una multa", indica.

SIN ENTENDERLO

El Ejecutivo, que ya recusó al magistrado por unas declaraciones sobre el proceso de Canal Sur Extremadura, no entiende por qué ahora se entiende que su recurso "tiene un fin dilatorio".

En cualquier caso, la Junta anuncia que, acudirá en defensa "de lo que estima es un derecho fundamental, a todas las instancias judiciales que sean necesarias, incluidos el Tribunal Constitucional y el Tribunal Europeo de Derechos Humanos", para "restablecer el derecho de contar con jueces imparciales".