El reciclado de medicamentos a través de los puntos Sigre instalados en las farmacias de la región aumentó en Extremadura un 11,95% en el año 2008, siendo la tercera comunidad autónoma donde más creció esta práctica en ese periodo.

La directora general de Evaluación y Calidad Ambiental de la Junta de Extremadura, María Pérez, explicó hoy que la labor que realiza Sigre mediante la recogida de medicamentos y posterior tratamiento de los mismos contribuye a evitar la contaminación ambiental que estos residuos pueden producir y a luchar contra el cambio climático, mejorando la calidad de vida de todos.

Estos puntos de recogida de medicamentos se instalaron en las farmacias de Extremadura en diciembre de 2001, y desde entonces la participación ciudadana ha sido creciente, por lo que actualmente el 61,4% de los hogares extremeños utiliza este servicio para reciclar los restos de medicamentos.

Durante el año 2008 se recogió una media mensual de 4,59 kilos de medicamentos por cada 1.000 habitantes en los 665 puntos Sigre existentes en las farmacias extremeñas.

A los evidentes beneficios medioambientales derivados de esta mayor concienciación y participación ciudadana se suma el beneficio sanitario derivado de retirar de los hogares los medicamentos caducados, en mal estado de conservación o que ya no se recuerda para qué fueron prescritos. El 73% de la población considera que automedicarse con los restos de medicamentos sobrantes puede entrañar algún riesgo para la salud.

El presidente del Colegio de Farmacéuticos de Badajoz, Cecilio Venegas, explicó que Extremadura fue la primera comunidad autónoma donde el programa SIGRE se implantó por completo y añadió que están adheridas al mismo todas las farmacias de la región.

A su vez, el director general de Sigre, Juan Carlos Mampaso, destacó que se reciclan los envases de los medicamentos, se separan los peligrosos y se eliminan y el resto se utiliza como combustible.