Devolver la tierra expropiada 34 años después. Esto es lo que debe hacer la Junta tras una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura que da la razón a dos hermanas de Coria. A la madre de esta le fueron expropiadas 30 hectáreas de terreno rústico en el término de Portaje en 1982.

La razón fue la construcción del pantano de Portaje que finalmente no anegó las 30 hectáreas expropiadas a esta familia. Sólo quedó dentro y en los márgenes de la presa 20 de esas hectáreas y otras 10 quedaron inutilizadas. Por ello, las hijas de esta vecina de Coria, como herederas, decidieron recuperar un terreno que siempre había pertenecido a la familia.

Hace poco más de un año reclamaron a la Junta la reversión de la tierra infrautilizada para el uso para el que fue expropiado pero la Junta se negó y ofreció a las propietarias originales más de 70.000 euros. Estas declinaron la oferta y decidieron presentar un recurso contencioso-administrativo ante el TSJEx que le dio la razón en septiembre. Ayer el DOE publicó una resolución de la Junta que dispone la ejecución de dicho fallo. Si en seis meses las escrituras no están cambiadas, el letrado de estas hermanas, Hilario Fernández, que tiene en su haber otras sentencias similares, volverá a la justicia.

El abogado considera que desde el primer momento el fallo era claro y se sorprende por la actitud de la Administración, de negarse a priori a devolver un terreno que no usa. "Este fallo no es relevante por la cantidad de terreno pero sí por el fondo de la cuestión y podría aplicarse a otras expropiaciones que no se han destinado al fin inicial, como en Granadilla", dice. Critica, además, que las administraciones utilizan de forma abusiva la ley de expropiación, de 1954, tiempos de Franco, y cuestiona su constitucionalidad.