En los últimos cinco meses, Extremadura ha acumulado un déficit de 300 litros de agua, el mayor déficit de precipitaciones de los últimos 130 años, según declaró ayer el director del Centro Meteorológico Territorial en Extremadura, Adolfo Marroquín, quien considera que este déficit es "irrecuperable".

En su opinión, esta situación "desde el punto de vista climatológico no se puede considerar sequía pero sí es un déficit extraordinario", asociado al cambio climático que está afectando al planeta.

Esta carencia de agua, según señaló, "está ocasionando daños a la agricultura, la ganadería y a la salud humana, porque la atmósfera no se ha lavado en mucho tiempo y provoca más casos de problemas respiratorios".

Adolfo Marroquín presidió ayer en Badajoz el acto celebrado para conmemorar el Día Meteorológico Mundial, que se centró en Tiempo, clima, agua y desarrollo sostenible , al que asistieron diversas autoridades, entre ellos el subdelegado del gobierno, Inocencio Ramos.

A lo largo de esta semana se prevén lluvias en la región, pero no muy importantes. El problema, en su opinión, es que en teoría esas perturbaciones deberían dejar cantidades importantes de lluvia, "pero la realidad es que en situaciones como la actual las precipitaciones son escasas".

En este acto, reivindicó la necesidad de conseguir un desarrollo climático sostenible, porque, según recordó, el desarrollo dejará de ser sostenible cuando vayamos más allá de lo que es reversible, "cuando produzcamos daños que ya no se puedan recuperar". En este sentido, este experto recordó a los gobiernos que si no se cumplen, como mínimo, las exigencias del protocolo de Kioto, "las cosas irán bastante mal".