El Ejecutivo extremeño, partidos y organizaciones agrarias coincidieron ayer en la necesidad de agotar todas las vías para evitar que se lleve a cabo la reforma de la Organización Común del Mercado (OCM) del Tabaco en los términos acordados por la Comisión Europea, y que entrará en vigor en el año 2005.

Así, el portavoz de la Mesa en Defensa del Cultivo del Tabaco, Higinio Burcio, manifestó a Efe que "todavía no está todo perdido" y añadió que este colectivo confía aún en que la carta firmada por los ministros de Agricultura de España, Francia, Italia, Grecia y Portugal en contra de la reforma propuesta "se haga valer", vetando la propuesta de la Comisión Europea.

En este sentido, el consejero de Agricultura y Medio Ambiente, José Luis Quintana, reclamó al Gobierno español que ejerza el derecho de veto para bloquear la reforma.

A este respecto, el portavoz del PP en la Asamblea, Diego Sánchez Duque, señaló que los extremeños "no podemos dar la batalla por perdida" y animó a todo el sector agrario y a las formaciones políticas a hacer un frente común para paralizar la reforma propuesta por el comisario europeo Franz Fischler.

Las organizaciones agrarias también insisten en esta idea. El coordinador regional de Coag, Luis Cortés, reiteró que la reforma del tabaco supone un "varapalo" y una "puñalada" al ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, y advirtió de que seguirán las movilizaciones.