Extremadura, Castilla-La Mancha, y País Vasco fueron las comunidades que registraron un aumento mayor de quejas presentadas al Defensor del Pueblo el año pasado en relación a 2007. Así se pone de relieve en el Informe del Defensor del Pueblo correspondiente a 2008, que ayer entregó el titular de la institución, Enrique Múgica, a los presidentes del Congreso y el Senado, José Bono y Javier Rojo.

Una cuarta parte de las quejas estaba relacionada con la gestión tributaria, y destaca además el elevado número de reclamaciones relacionadas con la función y el empleo público y con la seguridad ciudadana y vial. El número de expedientes abiertos el pasado año ascendió a 586 frente a las 294 del año anterior.