La comunidad extremeña registró entre 2008 y 2010 un total de 3.741 procesos de embargos directos y 545 desahucios, según explicó ayer el responsable de la Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros (Adicae) de Extremadura en Badajoz, Ubaldo Arias. En una asamblea para informar a los ciudadanos sobre la crisis hipotecaria, que también se ha celebrado en Cáceres y Mérida, este responsable indicó que los desahucios --cuando no se abandona la vivienda y se obliga a ello si lo procede un juez-- han ido en aumento al producirse 107 en el 2008, 154 en el 2009 y 284 en el 2010 y que también las citadas ejecuciones se han visto incrementadas al pasar de 361 en el 2007, a 723 en el 2008, 1.030 en el 2009 y 1.363 en el 2010.
Arias, explicó también que "últimamente se está utilizando mucho" la dación en pago, pero desde Adicae están percibiendo "que la gente, al final de cuentas, no sabe lo que es el proceso de embargo con la ejecución hipotecaria, la subasta y lo que conlleva la dación en pago". Al respecto, explicó que cuando se deja de pagar una cuota de una hipoteca, el banco tiene la posibilidad de iniciar un proceso de embargo y que si dicha deuda pendiente más los intereses de demora no son abonados, el piso o bien hipotecado se subasta.
Añadió que si en esta subasta el precio del inmueble fijado en la escritura no se cubre, el banco, según la Ley hipotecaria cuya reforma ha pedido, tiene la potestad de quedarse con esa vivienda al 50% del precio de tasación actual, depreciado con respecto a su precio inicial y lo que implica que el hipotecado "se queda sin vivienda, con una deuda perenne y se ve abocado a la exclusión social en muchos casos". Frente a ello, Arias sostuvo que antes de llegar a un proceso de embargo y de ejecución hipotecaria, hay otras posibilidades como "negociar con los bancos" una ampliación de tiempo para que baje la cuota hipotecaria al estar en un periodo de insolvencia.
