Extremadura, Castilla-La Mancha y Valencia se han unido para defender a los agricultores de la regiones europeas del sur frente a la propuesta que la presidencia de la Asamblea de Regiones Vitivinícolas (AREV), celebrada en la localidad rumana de Iulia Alba, respecto a la reforma de la OCM del vino.

El director general de Política Agraria Comunitaria de la Consejería de Agricultura de la Junta de Extremadura, Antonio Cabezas, defendió los "intereses" del sector extremeño frente a la postura de las regiones centroeuropeas, ante medidas tales como la destilación, ayudas a los mostos y la chaptalización (añadir azúcar de remolacha al vino).

La reunión pretendía acordar una postura común respecto a la propuesta que la Comisión Europea presentó sobre la reforma de la OCM del Vino el pasado 4 de julio. Sin embargo se produjo "un arduo debate que ha impedido aprobar por unanimidad las propuestas debatidas", aseguró Cabezas.