Otra sangría que no cesa. Otra causa de por qué se reduce el paro en Extremadura. Otra evidencia de que el mercado laboral sigue malherido y que las política de empleo no han calado todavía. La región volvió a perder población activa (aquella que o bien tiene un trabajo o bien está en búsqueda) durante el pasado año. Y la caída se notó especialmente entre los jóvenes. Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) dicen que si en Extremadura había 144.100 personas activas de entre 20 y 34 años en 2016, las mismas se redujeron a 137.100 en 2017. Esto es, 7.000 menos, una bajada que supone casi un 5%.

El motivo principal sigue siendo el mismo: la falta de oportunidades laborales, que obliga a veinteañeros y treinteañeros a hacer las maletas y a buscarse una oportunidad en otras regiones u otros países. Precisamente las cifras del INE también reflejan que más de 3.000 jóvenes extremeños emigraron en el último año al extranjero (2.724 salieron de la provincia de Badajoz y 779 de la de Cáceres).

De hecho, el Consejo de la Juventud viene alertando desde hace tiempo que, cada año, siguen abandonando la comunidad unos 3.500 jóvenes.

la cAÍDA DEMOGRÁFICA / Este éxodo va de la mano de uno de los principales problemas de la región: la caída demográfica. Los expertos ponen continuamente el foco en que si se marchan aquellos que están en edad de procrear, la falta de nacimientos en Extremadura no se solucionará (a lo que se añade la ausencia de inmigración, sobre todo procedente de Sudamérica, quienes aportaron un soplo de oxígeno a la natalidad).

Los datos de 2017 vienen a reflejar la realidad que se vive en Extremadura desde que empezó la crisis (de la que ya se han cumplido diez años y a la que Bruselas ya le ha puesto fin, aunque sea en teoría). Pero lo cierto es que la población activa de entre 20 y 34 años ha descendido un 20% en la última década en Extremadura. O lo que es lo mismo: ahora hay alrededor de 35.500 jóvenes menos como posible mano de obra, en muchos casos con alta cualificación. Una materia prima que se marcha, que se pierde. Y que costará que vuelva.