La vicepresidenta de la Junta y consejera de Hacienda y Administración Pública, Pilar Blanco-Morales, tachó ayer de «irresponsables» a algunos grupos políticos por rechazar, el pasado viernes en el Congreso de los Diputados, la nueva senda de estabilidad para los años 2019-2021, que suavizaba la presentada por el Gobierno anterior, al pasar el objetivo de déficit del 0,1% del PIB al 0,3%; lo que para el caso de Extremadura supondría contar con 40 millones de euros más. Momentos antes de entrar en el reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), recordó que el Partido Popular y Ciudadanos votaron en contra de los nuevos valores, mientras que Podemos y los nacionalistas catalanes se abstuvieron. Eso ha provocado que ayer, en esa reunión del Ministerio de Hacienda con los responsables autónomicos en esta materia, se confirmara que las comunidades autónomas deberán ajustar sus presupuestos a la senda de estabilidad del Gobierno de Mariano Rajoy, más restrictiva con el déficit. Por ello, tendrán que ajustarse al objetivo de déficit del 0,1% y no del 0,3%, como proponía el Gobierno de Pedro Sánchez en la nueva senda de estabilidad.

Blanco-Morales recalcó que determinados partidos políticos rechazan la flexibilidad que concede el Reino de España a las comunidades autónomas, cuando son éstas las que trasladan a los ciudadanos las políticas de Educación, Sanidad, Dependencia, en definitiva las políticas sociales. «Así lo han querido algunas fuerzas políticas, que no se preocupan de que las comunidades autónomas puedan hacer políticas al servicio de los ciudadanos», lamentó.

En esa reunión de ayer, el CPFF aprobó el Plan Económico-Financiero, enviado al Ministerio de Hacienda y Función Pública el pasado junio a fin de explicar la senda de cumplimiento para alcanzar los objetivos de estabilidad presupuestaria para los años 2018-2019. Con él, «Extremadura intentará cumplir con los objetivos de estabilidad, sin recortes», manifestó, la titular extremeña de Hacienda.

INSTRUMENTOS DEL GOBIERNO // En todo caso, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, confirmó ayer que las comunidades autónomas estarán en disposición de configurar sus cuentas públicas para 2019 aunque no haya Presupuestos Generales del Estado (PGE) para el próximo ejercicio, para lo que el Gobierno «habilitará los instrumentos legales oportunos» para llevarlo a cabo y los ciudadanos puedan «aprovechar la recuperación económica». En este sentido, explicó que el Gobierno no ha recibido por parte de las formaciones políticas ninguna propuesta de distribución de los objetivos recogidos en la senda presupuestaria que aprobó y fue rechazada por el Congreso el pasado viernes, pero sigue mostrando su «mano tendida» y volverá a presentar la senda en un mes en la Cámara Baja.

«Las comunidades autónomas no están jerárquicamente por debajo de los Presupuestos Generales, son una parte de la recaudación que pagan los ciudadanos», recalcó la ministra, que hizo un llamamiento «a la reflexión» de los partidos políticos para lograr una senda «beneficiosa» para todos los ciudadanos.