"Lo lamentamos por los clientes, pero no podemos dejarnos chantajear". Así de contundente se ha mostrado esta mañana el director general de viajeros de Renfe, Enrique Urkijo, en relación a la huelga de interventores convocada por CCOO en Extremadura para los lunes, miércoles, viernes y domingos desde este mes para reclamar una ampliación de plantilla y más descansos, entre otras cuestiones que la compañía considera "innecesarias". Urkijo reitera que si el sindicato deja de actuar de manera "ilegal" como dejar sin servicio a los viajeros sin previo aviso (como ha ocurrido en Cabeza del Buey) o aumentando el absentismo laboral (las bajas han pasado en un mes del 5% al 20% en una plantilla de 20 trabajadores), entonces "Renfe hará los servicios íntegros".

El responsable de viajeros de la compañía argumentó que lo que pretende CCOO es que los interventores cobren "350 euros más al mes", cuando a principios de año se les subió el sueldo, que alcanza los "40.000 euros brutos anuales"; y que en caso de que no se produzca esta subida salarial "piden dos interventores más para tener 18 días más de vacaciones al año", pero "no podemos hacer este tipo de concesiones", matiza, cuando la situación del país va por otros derroteros.

Además, señaló que actualmente de cada 15 días de trabajo, los interventores pasan 7 a bordo de los trenes, tienen 5 de descanso y 3 de guardias. En total, cada 15 días tienen asignadas 68 horas de trabajo, de las que 27 van a bordo de los trenes, apuntó Urkijo.

Las mejoras para Extremadura

Por otro lado, Renfe contará en el primer semestre en Extremadura con un 15 trenes, de los que 10 serán del tipo 598 (alcanzan los 160 kilómetros por hora) y 5 del tipo 594. Esto hará que los primeros tendrán una antigüedad máxima de 5 años y los demás de 10 años. En este sentido, Urkijo anuncia que la inversión alcanzará el próximo año los 50 millones de euros para renovar la flota de trenes en Extremadura.

Pese a ello, aclara, "desde un punto de vista económico el servicio es una ruina", ya que con la venta de billetes en la región sólo alcanza al 8,67% de la cobertura que presta, pero el resto, más del 91% lo paga la Junta de Extremadura. "Renfe no decide nunca dejar de prestar un servicio, lo decide quien nos paga, la Junta, el Estado o quien sea", comenta. Por ello, indica que "la Junta apuesta claramente por el ferrocarril, y Renfe también, aunque en la mayoría de los casos los servicios son deficitarios".

A este respecto, hasta el primer semestre del año la compañía dio servicio a 314.578 viajeros en la región (al cabo de un año suelen coger el tren 600.000 personas) con una puntualidad del 92%, y un índice de calidad valorado por los clientes del 6,95% (6,64 de media en España).