Semana clave para la renta básica en Extremadura. La tramitación de la ley avanza y tras cerrar ayer los sindicatos, los colectivos ciudadanos y los trabajadores sociales la ronda de comparecencias en la Asamblea para hacer aportaciones al texto, queda abierto el plazo para que los grupos parlamentarios presenten alegaciones. Conscientes de que este es el momento en el que sus exigencias pueden ser tenidas en cuenta para incorporarse al borrador antes de su aprobación definitiva en pleno el próximo mes de mayo, las plataformas pro renta básica encaran la recta final con nuevas manifestaciones y agotan la vía de la negociación tras mantener otra reunión con el consejero Luis Alfonso Hernández Carrón.

Por la Comisión de Salud y Política Social de la Asamblea pasaron ayer los responsables de los líderes de UGT y CCOO, miembros del colectivo por la Renta Básica, representantes de la Plataforma del Tercer Sector, la Confederación Regional de Empresarios de Extremadura (Creex) y la responsable del Colegio Oficial de Trabajadores Sociales de Badajoz, que propusieron a los grupos sus ideas para mejorar el proyecto de ley. Casi todos coincidieron en la necesidad de dotar la norma de un presupuesto justo y suficiente para atender de forma digna las necesidades de quienes carecen de medios económicos, recordando además que la tasa de paro supera ya el 34% en la región y que son más de 70.000 las personas que no tienen ningún tipo ingreso. En la línea de los planteamientos del PSOE e IU, sindicatos y plataformas consideraron que 13 millones es una cantidad insuficiente, al igual que las ayudas que se plantean, entre 300 y 690 euros mensuales. "Gasten el dinero en la gente, que sí hay para pagar 300 millones de intereses a los bancos, 15 para los sueldos de los políticos y cuatro para el aeropuerto", señaló uno de los portavoces de la Plataforma por la Renta Básica, Manuel Cañada, que apeló a sus excompañeros de IU a movilizarse por su causa. Otra de las cuestiones más polémicas es el itinerario de inserción que deberán seguir los beneficiarios, medida que los colectivos ciudadanos rechazan pero que sin embargo, se consideró muy acertada por la Creex.

Mientras se sucedían las comparecencias en la Asamblea, Carrón defendía desde Badajoz su proyecto de ley alegando que la cobertura será muy alta, ya que llegar la ayuda a 5.000 titulares supone que por extensión a la familia, serán entre 10.000 y 15.000 los beneficiarios finales, el 0,45% de la población. En unas jornadas para los trabajadores de los servicios sociales de base, el consejero anunció además que la Junta reforzará la atención de las solicitudes de la renta básica con más personal y un nuevo programa informático. Carrón también se reunió ayer de nuevo con la Plataforma por la Renta Básica para buscar puntos de encuentro y ya por la tarde, el colectivo celebró dos manifestaciones en Mérida y Plasencia apoyadas por el PSOE, IU, Prex-Crex, Siex, UGT y CCOO en las que un millar de personas exigieron una renta básica digna, la creación de 25.000 empleos públicos y la paralización de los desahucios.