Da gusto visitar instalaciones como esta y más en una región como Extremadura". El Rey don Juan Carlos estuvo ayer en la Escuela de Tráfico de Mérida y ensalzó la modernización que ha experimentado este centro desde su inauguración, en 1996 --a la que también asistió, en aquel caso con la Reina--, y celebró que se ubique en Extremadura. Su Majestad presenció unas clases prácticas de los agentes de la Guardia Civil en formación y una exhibición celebrada en su honor, acompañado por el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, y el director general de Tráfico, Pere Navarro, entre otros.

Además, al término del acto se reunió con el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, el presidente de la Asamblea, Juan Ramón Ferreira, la delegada del Gobierno, Carmen Pereira, y el alcalde de Mérida, Angel Calle. Justo cuando se hacía una foto de familia con ellos, el Rey valoró, a preguntas de los periodistas, su recorrido por la Escuela de Tráfico, que calificó como "muy interesante". "Hace muchos años que no venía y me ha encantado ver cómo ha mejorado y cómo está funcionando".

Según explicó, ha notado los cambios experimentados por el centro extremeño en los últimos 14 años en "la manera de educar, de formar, de enseñar, de hacer los cursos". "Se ha modernizado y se ha adaptado a los tiempos", consideró el monarca, añadiendo a continuación que "da gusto visitas instalaciones como esta y más en una región como Extremadura".

Su Majestad hizo estas declaraciones tras visitar el centro, que solo este año formará a 700 agentes de Tráfico como motoristas, 100 de atestados y 50 de dirección, aparte de los cursos de actualización de conocimientos. A sus instalaciones llegó don Juan Carlos en torno a las 13.35 horas en un helicóptero de la Fuerza Aérea Española tras presidir por la mañana el funeral celebrado en Rota en honor de los cuatro marinos fallecidos en Haití. Así mantiene su tradición de visitar cada año una instalación de la Guardia Civil (hace tres estuvo en la Dirección General de Tráfico y los dos siguientes fue, respectivamente, a la Unidades de Intervención y de Acción Rural).

En este caso fue el turno de la Escuela de Tráfico ubicada en la capital extremeña, cuyo coronel director, José Luis Navarro, recibió al monarca en el patio del centro, donde aterrizó el helicóptero, y le acompañó, con otras autoridades, en su visita. Esta comenzó con una reunión con los mandos del centro, tras la cual el Rey se trasladó a una torrecilla para asistir a las clases prácticas que en ese momento estaban realizando algunos de los alumnos de la Escuela de Tráfico, que posteriormente desarrollaron una exhibición en su honor. Después saludó al presidente de la Junta, de la Asamblea, la delegada del Gobierno y el alcalde emeritense y, finalmente, se hizo una foto de familia con varios de los miembros de la Escuela de Tráfico. Antes, también tuvo oportunidad de observar el trabajo del Equipo de Reconstrucción de Accidentes de la Guardia Civil.

FAMILIARES Y CURIOSOS Ante la visita del Rey, muchos de los familiares de los trabajadores o alumnos de la Escuela de Tráfico se acercaron ayer a sus instalaciones para presenciar la exhibición e intentar ver a Su Majestad. Nandi Hernández, esposa de uno de los agentes que hicieron la demostración, mostraba ayer su preocupación porque todo saliera bien y ninguno de los participantes se cayera, ya que realizaron ejercicios muy complicados (como circular de pie o con las rodillas en el manillar, por poner solo dos ejemplos).

Con esas familias, también algunos curiosos se acercaron a la zona para intentar ver al monarca. Fue el caso de Mari Carmen Cidoncha, que se enteró por casualidad de la visita de don Juan Carlos y mostraba ayer su emoción por haber sido testigo de la misma. "Me ha hecho mucha ilusión, siempre le había visto por la tele y ahora sé que es de verdad".