Extremadura y Madrid son las únicas comunidades autónomas en las que sus carreteras no presentan niveles de accidentalidad considerados de riesgo alto. Así lo asegura el informe EuroRAP 2005, en el que se analiza la siniestralidad y el índice de peligrosidad de la red de carreteras del Estado, en función de los accidentes con víctimas mortales y heridos de gravedad ocurridos entre el 2002 y el 2004.

Este informe sitúa a las vías extremeñas entre las menos peligrosas del país, al contrario que las carreteras de Aragón y Valencia, que ocupan los primeros puestos con un mayor número de tramos considerados de riesgo alto o riesgo medio-alto.

No obstante, la red estatal en la comunidad extremeña cuenta con un total de 27 tramos en los que el número de accidentes y sus consecuencias en el periodo analizado les sitúan en niveles de riesgo medio, medio bajo o bajo. En este sentido, sólo hay cuatro regiones con menos tramos de riesgo --aunque su peligrosidad es mayor--, como son Murcia (16), La Rioja (19), Navarra (24) y Cantabria (25). Lejos quedan comunidades como Castilla y León, con 130 zonas conflictivas, y Andalucía, con 118.

MAS DE MEDIO-BAJO Los puntos de riesgo más elevados en Extremadura son los de nivel medio-bajo. El informe enumera hasta 16, seguidos de los de nivel medio, una decena, y sólo uno de nivel bajo. El estudio EuroRAP tan sólo localiza el punto de riesgo bajo, que lo sitúa en Badajoz, en el cruce de la N-432 (la carretera a Sevilla) con la N-5.

En cuanto al tipo de accidente, los más numerosos ocurrieron por la salida de la vía de los vehículos implicados, seguidos de las colisiones frontales. En ambos casos, la mayor incidencia tuvo lugar en las carreteras convencionales.

Para elaborar el informe se han analizado 76.740 accidentes con víctimas ocurridos en tramos de carreteras de todo el país, con unos datos de tráfico inferiores a los 5.000 vehículos al día, ya que el estudio considera que en estos tramos es muy significativa la aleatoriedad de los accidentes, por lo que pueden dar lugar a incoherencias en los resultados finales.

El bajo nivel de riesgo de las carreteras extremeñas puede ser una de las causas por las que Extremadura ha sido la comunidad en la que más se ha reducido la siniestralidad en el 2005.

Los últimos datos de la Dirección General de Tráfico (DGT) indican que Extremadura lideró el ránking nacional tanto en el descenso de accidentes como en el número de víctimas mortales. Respecto al balance del 2004, los siniestros que tuvieron lugar en las carreteras extremeñas se redujeron casi un 20%, al pasar de 112 a 90 el pasado año. En el apartado de muertes registradas, a lo largo del 2004 se contabilizaron en la comunidad 145, por las 97 del último año, lo que supuso un 33% menos.