Si no es la gasolina, son los cereales o, como en abril, la ropa y calzado, pero los precios siguen sin dar un respiro ni a los extremeños ni al resto de los españoles. Así se desprende del último dato del Indice de Precios al Consumo (IPC), difundido ayer por el INE y correspondiente al mes pasado, que sube un 1,5% en Extremadura, cuatro décimas más que en el conjunto del país, aunque también tres menos de lo que aumentó en abril del año pasado. En este caso y como es habitual en abril, el incremento viene sobre todo motivado por el de la ropa y el calzado, como consecuencia del inicio de la temporada primavera-verano. Sin embargo, la tasa interanual se reduce por primera vez tras siete meses de alzas, quedándose en el 4,2% tanto en la región como en el España.

De esta manera, este último valor, que mide la diferencia de los precios con respecto a los del año anterior, vuelve al nivel que registraba en diciembre del año pasado, tras haber llegado al 4,6% en Extremadura y una décima menos en España en marzo. A pesar de ello, la inflación se mantiene por encima del 4%, es decir, más del doble que el objetivo fijado por el Gobierno para el conjunto del año (2%).

POR SECTORES Durante el mes pasado, los extremeños padecieron sobre todo la subida de los precios registrada en el del vestido y calzado (11,8%), que se acentúa en el caso de las prendas de vestir de niño y bebé (21,2%) y de mujer (15,6%) y es más leve en las de los hombres (5,1%). A este apartado le siguen los de vivienda, que aumenta un 1,8% por el mayor coste del gas, y transporte, que lo hace un 0,6% por el encarecimiento de los carburantes y lubricantes y los automóviles. Esta situación se repite a nivel nacional, si bien las subidas son menores en todos los casos (9,3%, 0,9% y 0,5%, respectivamente).

Además, el IPC subió cinco décimas en las áreas de menaje, medicina, hoteles, cafés y restaurantes y otros, mientras que se quedó en el 0,3% para los alimentos y bebidas no alcohólicas y en el 0,1% para las bebidas alcohólicas y el tabaco. Finalmente, las comunicaciones mantuvieron sus precios estables y los únicos que bajaron fueron los de ocio y cultura (-0,1%), como consecuencia --al igual que ocurre en el conjunto del país-- del descenso de los precios de los viajes organizados tras la finalización de la Semana Santa.

Con estos índices, la región se convierte en una de las más inflacionistas del país, solo superada por Murcia (donde los precios subieron un 1,7% en abril) y Ceuta (1,6%), aparte de quedar igualada con Murcia. Sin embargo, la tasa interanual (comparativa con el mismo mes del año anterior) se reduce en tres décimas con respecto a marzo, situándose al mismo nivel que la media española (4,2%), mientras que las mayores subidas se registran en Cantabria (4,7%) y Castilla y León (4,5%).

Todas estas cifras confirman, por ahora, la previsión del Gobierno de la moderación de la inflación a partir de abril, pese a que el vicepresidente segundo y ministro de Economía, Pedro Solbes, reconoció ayer que un IPC por encima del 4% sigue siendo "malo", informa Efe. No obstante, reiteró que la inflación puede bajar en torno a una décima "si no hay sorpresas adicionales".