La agencia de calificación Standard&Poors confirmó ayer la revisión al alza de la perspectiva de la deuda Extremeña, que sube de calificación junto a la Madrid y Galicia mientras las de Andalucía, Cataluña y Valencia se mantienen en negativo. Hace una semana, S&P mejoró también la perspectiva de la deuda soberana española. En lo que respecta a la región, la agencia mantiene su calificación en BBB/A-3 --calidad crediticia aceptable con cierta resistencia a entornos adversos--, pero eleva la perspectiva por su convicción de que la comunidad no se desviará en gran medida de sus objetivos fiscales para el periodo 2013/2015. El presidente de la Junta, José Antonio Monago, ya valoró de forma muy positiva que S&P hubiera sacado la deuda extremeña del llamado bono basura y la hubiera colocado en el nivel de la inversión.

La calificación que se aplica a la comunidad gallega, también BBB-/A-3, y el hecho de elevar su perspectiva de estable a negativa, es un reflejo de la mejora de la perspectiva soberana española que la agencia decidió el pasado 29 de noviembre. En cuanto a la comunidad de Madrid, que comparte con las anteriores la calificación, la agencia explica que "no cumple las condiciones para exhibir una nota más alta que la deuda soberana".

ANDALUCIA La deuda a largo plazo de Andalucía mantiene también la calificación de BBB, y aunque S&P cree que no se desviará de forma notable de sus objetivos fiscales y seguirá pudiendo financiarse gracias al apoyo del Gobierno, mantiene aún una elevada deuda pública y graves déficit, lo que limita su solvencia. Así, mantiene en negativo su perspectiva porque considera que existe un cierto riesgo de que se desvíe de sus objetivos de déficit.

Por lo que respecta a Cataluña, se mantiene en el bono basura pese a que la agencia reconoce que continúa luchando contra el déficit, del que se ha desviado de forma "moderada", y continúa teniendo acceso a la liquidez que le proporciona el Gobierno. No obstante, su solvencia es muy cuestionable por su elevada deuda y déficit y su negativa gestión financiera. Teme que en los próximos meses, el proceso de consolidación fiscal podría perder impulso y aumentar sus deudas.

Con los mismo argumentos, mantiene en BB la deuda a largo plazo de la comunidad valenciana y en negativo su perspectiva.