La crisis de médicos que atraviesa actualmente la sanidad portuguesa supone una puerta abierta para los licenciados extremeños. En la actualidad más de 300 extremeños ejercen la medicina en el país vecino, una cifra que podría duplicarse en pocos meses, aseguran los especialistas, ya que en los últimos diez años el número de doctores que trabajan en los centros de salud portugueses se ha visto reducido en casi un millar y las previsiones para el futuro no son mejores.

En la actualidad cerca de un millón de portugueses no disponen de médico de familia, según la Asociación Portuguesa de Médicos de Clínica General, que sostiene que dentro de diez años el problema será mayor, ya que se prevé que la mitad de la población se quede sin atención en los centros sanitarios.

POCOS LICENCIADOS

No hay licenciados portugueses que se incorporen a la especialidad de Medicina de Familia, una situación que obligará a la sanidad lusa a abastecerse de médicos españoles. Esta situación supondrá, según los médicos, un nuevo éxodo de sanitarios extremeños a Portugal, como el que se produjo hace algo más de dos años y que llevó a unos 300 médicos a trabajar principalmente en centros de salud de poblaciones cercanas a la frontera.

La asociación portuguesa señala que el número de médicos de familia que empiezan a prestar sus servicios cada año debería duplicarse para facilitar una atención adecuada a la población. Es decir, los 150 especialistas en Medicina Familiar que entran en servicio tendrían que ser 300.

Las necesidades sanitarias de Portugal no son nuevas, desde hace unos años la sanidad lusa tiene problemas para cubrir algunas especialidades, principalmente de hospitales de zonas del interior, como los municipios cercanos a la frontera extremeña, ya que los médicos portugueses suelen decantarse por ocupar plazas en ciudades grandes.

No obstante, en las últimas fechas las autoridades portuguesas habían endurecido sus exigencias burocráticas a los facultativos que llegaban al país, aunque los expertos indican que ahora tendrán que ser más permisivas.