Las organizaciones agrarias UPA-UCE y Asaja consideran que las lluvias registradas en los últimos días en Extremadura son positivas "aunque insuficientes" para el campo extremeño.

Ignacio Huertas, secretario regional de UPA, señala que el agua ha caído "de forma muy dispersa" y en poca cantidad, por lo que "no se ha impregnado en la tierra". Esto hace que si no sigue lloviendo durante al menos dos semanas, continuará la sequía. En este sentido, avanza que las predicciones meteorológicas auguran un cese de los chubascos en la comunidad y una importante subida de las temperaturas a partir de la semana que viene. Si esto se confirma, este nuevo cambio meteorológico provocará que no puedan crecer los pastos que están empezando a brotar, mientras que la siembra, de la que "casi todo se ha perdido ya", tampoco notará una mejora sensible.

Por su parte, el presidente de Asaja Extremadura, Angel García Blanco, coincide en que aún es insuficiente, aunque es más optimista que Huertas y opina que los pastos habrán crecido a finales del mes de abril "si ahora no hace demasiado frío o demasiado calor".

Por lo que se refiere a la cantidad de agua que ha caído, apunta que "está descargando de firma lenta, muy bien" si se prolonga durante unos días. Estas lluvias benefician especialmente, añade, a los cereales de secano y a las siembras, mientras que la zona que actualmente sufre más problemas es, a su juicio, la Ribera de Gata, en la provincia de Cáceres.

Por otra parte, recordó al consejero de Agricultura, José Luis Quintana, que en el 2004 muchas de las ayudas del Feoga se pagaron en las mismas fechas que este año, por lo que "le va a crecer la nariz si sigue diciendo que las han adelantado".