Los apicultores extremeños no se resignan a quedarse sin percibir la prima de polinización en el 2012. En principio, la partida destinada a estas ayudas, que este año fue de aproximadamente 1,7 millones de euros, ha quedado suprimida de los presupuestos regionales para el ejercicio próximo. Sin embargo, representantes de las principales cooperativas apícolas extremeñas y de las organizaciones agrarias se reunieron la pasada semana con los tres grupos parlamentarios con presencia en la Asamblea de Extremadura para reclamar que no se eliminen estas subvenciones.

Paulino Marcos, responsable del sector apícola de COAG Extremadura, explica que PP, PSOE e IU se mostraron dispuestos a que se dé marcha atrás en esta decisión, si bien desde el PP se matizó que "no estaban seguros de que la partida pudiera tener la misma cuantía" que en el 2011. "En eso vamos a ser inflexibles, no vamos a permitir que si la Consejería de Agricultura hace unos recortes del 2,5%, en nuestro caso sea del cien por cien", añade Marcos, que recalca que esta línea de ayudas ya sufrió este año un tijeretazo que rondó el 30% respecto al 2010.

La prima de polinización supone entre un 10% y un 15% de los ingresos de los apicultores extremeños (unos 2.500 euros por 500 colmenas). Además, resulta clave para dos grupos de profesionales. Por un lado, el de aquellos que "están a punto de jubilarse, que son ya menos productivos y necesitan complementar su renta". Por otro, el que integran los jóvenes que se van incorporando a esta actividad. "Esta es la única ayuda que pueden cobrar el primer y el segundo años. Necesitan este empujón para ser capaces de mantenerse".

Esta medida de apoyo al sector fue establecida por la Junta hace ya dos décadas con el fin de compensar la acción beneficiosa que las abejas ejercen, mediante la polinización, en el mantenimiento de los ecosistemas y en la producción agraria. "El 80% de las plantas necesitan de la polinización de las abejas. Y de esa proporción, el 60% son cultivos agrícolas", destaca Marcos, que también es presidente de la Asociación Cacereña de Apicultores.

En Extremadura hay actualmente unos mil apicultores profesionales, que suman 440.000 colmenas, según las estimaciones de COAG. Las dos principales zonas de producción son Fuenlabrada de los Montes (Badajoz) y la comarca de Las Hurdes (Cáceres). Una posible supresión de la prima de polinización llegaría, además, en un momento complicado para este sector, que tiene que competir con las mieles llegadas de países como Argentina o China. "La mano de obra es mucho más barata allí y los controles en aduana prácticamente no existen. Están metiendo un montón de mieles que luego mezclan incluso con las nacionales y se derivan a otros países como si fueran españolas", lamenta este responsable de COAG.

Igualmente, los apicultores tienen que enfrentarse a la amenaza del despoblamiento de las colmenas y sufrir los estragos que este causa en su producción. "Nadie sabe qué es lo que lo provoca, solo que de una parte de nuestras colmenas las abejas desaparecen. Dejan el nido de cría y se van. Entre 2004 y 2005 se morirían en Extremadura en torno al 40% de las colmenas y este año hay ya apicultores que se están quejando de que podemos estar por encima del 15% de mortandad".