El sector nacional de la inspección técnica de vehículos está formado por 42 empresas ajenas al propio sector, que cuentan con 221 centros repartidos por toda España y que, a su vez, disponen de 561 líneas de inspección. Este mercado mueve al año unos 250 millones de euros.

Entre los aspectos que figuran en el Real Decreto se incluye un régimen sancionador. El incumplimiento de las condiciones técnicas establecidas en la normativa supone una infracción que será sancionada con una multa de hasta 30.500 euros. Además, cuando la comisión de la infracción menoscabe gravemente la calidad de los servicios de inspección o cuando el incumplimiento se produzca de forma reiterada, puede revocarse la autorización a la concesión.

El objetivo del Real Decreto es garantizar en todo el territorio nacional la alta calidad y la homogeneidad de las ITV.