El sector del juego extremeño está muy satisfecho con el avance que supone para el futuro de sus negocios la nueva regulación. Sin embargo quedan pendiente algunos flecos que tendrán que revisarse en el futuro. Algunos de ellos ni siquiera dependen del Gobierno autonómico. Se trata, por ejemplo, de la "competencia absolutamente desleal" que para este sector empresarial supone la práctica de los juegos on line, "por el que no se pagan impuestos y además tienen los domicilios fiscales fuera de España, sin ningún tipo de control, con acceso de menores". Así lo indica Juan Puerto, de AEMEXA, la asociación que engloba a las empresas distribuidoras de tragaperras en la región.

Por su parte, los propietarios de bingos no han quedado del todo satisfechos con un par de cuestiones relativas a sus negocios. El presidente de la asociación que los engloba, AEBEx, José Luis Iniesta, no comparte que se haya limitado a 15 el numero máximo de las nuevas máquinas especiales para este tipo de sala, las B3, para cada establecimiento.

Considera que esta limitación supone un paso atrás en sus expectativas de negocio, sobre todo teniendo en cuenta que han de acometer una inversión para habilitar una sala exclusiva para estas máquinas. Tampoco comparte que se haya establecido un máximo de 15.000 euros, para el premio acumulado o jackpot en este tipo de juegos, cuando en otras regiones como Andalucía no existe este límite.