Vinibasa, la destilería de Almendralejo que cerró sus puertas en mayo al no poder hacer frente a la presión ciudadana causada por los malos olores que desprendía, podría reabrir sus puertas en breve, si así lo decide el ayuntamiento de la localidad. Lo haría atendiendo a las reclamaciones de todo el sector vitivinícola extremeño, con la finalidad de no empeorar más la situación de unos agricultores y bodegueros ya afectados por la incertidumbre provocada por la reforma de la OCM del Vino, que precisamente entra hoy en vigor.

Las organizaciones agrarias UPA-UCE, COAG y APAG, la Unión Extremeña de Cooperativas Agrarias (Unexca) y la Asociación de Empresarios del Vino (Asevex), unieron ayer sus voces para reclamar la apertura de la alcoholera con el fin de evitar la paralización de la vendimia, cuyo inicio está previsto para los próximos 20 o 25 días. Esgrimieron como argumento que la única destilería abierta actualmente --Vinícola del Oeste, situada en Villafranca de los Barros--, no tiene capacidad para destilar el orujo de uva que cada campaña produce la vendimia en Extremadura. Se trata de un subproducto residual a base de pieles y semillas generado después de pasar la uva por la prensa, y que necesita un tratamiento adecuado para no contaminar, y que no puede almacenarse ni arrojarse como comida a los animales.

La decisión final sobre la reapertura de la alcoholera recae sobre el ayuntamiento de la ciudad. Este diario trató ayer de ponerse en contacto con el alcalde, José María Ramírez, pero no fue posible. Desde la Junta de Extremadura remitieron un comunicado de prensa en el que establecían su apoyo a esta medida de forma "temporal y coyuntural" hasta que puedan estar concluidas las obras, lo que está previsto para los próximos meses, de una nueva destilería que Viñaoliva, una agrupación de cooperativas, está construyendo a las afueras de la ciudad, con una inversión aproximada de unos 12 millones de euros.

Sobre la postura del ayuntamiento a atender las demandas del sector, el consejero de Agricultura y Desarrollo Rural, Juan María Vázquez, indica en el comunicado que el alcalde, con quien se puso ayer en contacto, mostró "buena predisposición" al respecto.

Según dijo el secretario general de COAG, Juan Moreno, las instalaciones de Vinibasa se encuentran en perfecto estado para entrar en funcionamiento, una medida que consideran imprescindible para unos agricultores que "no están en condiciones" de asumir el coste que supondría transportar a destilerías de otras regiones este subproducto de la uva. Así, el presidente de APAG, Bibiano Serrano, señaló que los viticultores no saben cuánto costará el kilo de uvas este año, aunque sí tienen claro que "todo será aún peor si hay que llevar fuera el orujo".

Por su parte, el representante de Unexca, Luis Cumplido, subrayó que los viticultores no tienen la intención de generar "alarma social" con su petición.

Con respecto a la campaña de este año, la responsable del área de vino de UPA-UCE Extremadura, Catalina García, subrayó que con la "incertidumbre" de la OCM, se calcula que la cosecha de algunas zonas tenga una bajada considerable, ya que no se prevén buenos precios y hay "problemas de falta de mano de obra", aseguró.