Fumata blanca en la Sanidad extremeña, un año después. La Consejería de Salud y Política Social y todas las organizaciones sindicales con representación en la mesa sectorial sellaron ayer un pacto que parece definitivo sobre la aplicación de la jornada de 37,5 horas semanales para los 20.000 profesionales sanitarios de la región después de que la instrucción de julio del año pasado, que ya fue modificada en septiembre, no haya resuelto los problemas generados en los turnos rotatorios.

Según explicaron el director gerente y el secretario del Servicio Extremeño de Salud (SES), Joaquín García Guerrero y César Santos respectivamente, con el nuevo acuerdo se marca una jornada de trabajo general de 8 a 15.30 horas sin distinción entre los distintos niveles ni turnos, aunque "con todos los parámetros definidos de manera taxativa para que los trabajadores sepan exactamente qué tienen que hacer". "Vamos a una jornada similar a la del antiguo Insalud, como la que se aplica ya en otras comunidades", apuntó Santos, que especificó que se aplicará desde el próximo mes.

En la firma del acuerdo, tanto los gestores del SES como los representantes de los seis sindicatos presentes (Simex, Satse, CSIF, UGT, CCOO y SAE) coincidieron en destacar el "grandísimo trabajo" que se ha desarrollado en este año de negociaciones, que finalmente se salda con un pacto "fruto de un ejercicio de madurez". Los representantes sindicales han reconocido la buena disposición de García y Santos, aunque han señalado que el acuerdo llega con un año de retraso. "Ha sido necesario que cambiaran el secretario y el gerente del SES para que se haya firmado el pacto", apuntó el responsable regional del sindicato de enfermeros Satse, Damián Cumbres.

De igual forma, los representantes de los trabajadores han puesto de manifiesto que el de la jornada laboral es "un acuerdo de mínimos" y han puesto sobre la mesa la necesidad de que la Administración también pacte los permisos y los turnos de vacaciones, aspectos que según el responsable de CCOO, Angel Benito, han tenido que quedar ahora fuera de la negociación.