Los sindicatos CSI-CSIF y UGT, a través de su Federación de Servicios Públicos, han salido al paso de las propuestas planteadas por la Confederación Empresarial de Extremadura (Creex) para afrontar la crisis, y en concreto han rechazado las medidas encaminadas a reducir la oferta pública de empleo y la privatización de determinados organismos de la administración regional. La central sindical mayoritaria en la Junta, CSI-CSIF considera "alarmante" la propuesta de reducir la oferta de empleo público al considerar que provocaría un empeoramiento de los servicios prestados al ciudadano. Como alternativa, plantean la necesidad de poner en marcha medidas económicas correctoras, siempre alejadas de la "destrucción de empleo de calidad", informa Europa Press.

Por su parte, FSP-UGT rechaza enérgicamente la privatización de los servicios y reafirma su apuesta por las prestaciones públicas como "garantía de acceso de todos los ciudadanos en condiciones de igualdad sin que deban regirse por criterios empresariales y/o economicistas". Desde este sindicato hacen una especial alusión a los servicios que se prestan a colectivos desfavorecidos, pero también a la educación o la sanidad.