Los secretarios generales de CCOO y UGT de Extremadura, Julián Carretero y Miguel Bernal, respectivamente, mostraron ayer su satisfacción por la sentencia dictada por el Juzgado de lo Penal de Mérida que absuelve de los delitos de coacciones, amenazas e injurias a Bernal y al ex secretario de CCOO, Valentín García, al considerar que ésta pone de manifiesto "el liderazgo sindical" y "da un revolcón a las pretensiones del PP de criminalizar a los sindicatos".

Ambos dirigentes sindicales valoraron ayer la citada sentencia, en la que se considera probado que la mañana del 20 de junio del 2002, día de huelga general contra el decretazo , un piquete formado por Valentín García y Bernal, entre otros, intentaron impedir que los autobuses de la Compañía de Transportes Urbanos de Mérida S. L., empresa pública municipal, salieran a la calle. El juez considera que los hechos no son constitutivos de un delito de amenazas, injurias y coacciones, como apuntaba la acusación, sino de una falta de coacciones, por la que los dirigentes sindicales y otros dos compañeros deberán pagar 360 euros de multa.

Bernal y Carretero anunciaron ayer que sus sindicatos recurrirán la sentencia, al entender que "se pone una multa por una huelga contra algo que era ilegal, como se ha demostrado hace unos días por el Tribunal Constitucional". Además, el secretario de UGT no comparte, según dijo, la interpretación que hace el juez sobre la labor de un piquete, "pues dice que se excedió en su cometido, ya que su labor es sólo la de informar, sin embargo yo creo que su obligación es doble: la de informar y la de velar porque el derecho fundamental de la huelga se pueda desarrollar".

En este sentido Bernal criticó el "desprecio a los derechos de los trabajadores manifestado por el PP de Mérida durante todos estos años, con el silencio cómplice de Floriano" y aseguró que este proceso, que ha durado cinco años y con el que se pretendía meter en la cárcel e inhabilitar a los dirigentes sindicales, "responde a una estrategia política del PP del 2000 al 2004, periodo en el que persiguió a muchos sindicalistas".

Bernal manifestó que en ese tiempo más de 50 sindicalistas de CCOO y UGT fueron multados por el anterior delegado del Gobierno, Oscar Baselga, por cortar carreteras, además de otros 4 que protestaron ante la Delegación del Gobierno, señaló.