El número de accidentes laborales mortales ha aumentado este año en Extremadura, al pasar de los 9 de 2009 a los 13 contabilizados hasta hoy, aunque el índice general de siniestralidad ha descendido un 14,2 por ciento, según los datos ofrecidos hoy por la consejera de Igualdad y Empleo, Pilar Lucio.

Lucio ha proporcionado estas cifras momentos antes de presidir la Comisión Regional de Condiciones de Trabajo y Salud Laboral, que hoy se ha reunido en Mérida con carácter extraordinario tras los dos últimos accidentes mortales ocurridos en la región, uno en Jerez de los Caballeros y otro en Almaraz.

A estos 13 accidentes mortales se suman otros tres o cuatro que no figuran en la estadística oficial porque, según ha explicado a los periodistas el director general de Trabajo, Juan Manuel Fortuna, las víctimas no estaban dadas de alta en la Seguridad Social, lo cual no impide que sus casos hayan sido investigados.

Respecto a los accidentes, el director general ha precisado que han bajado un 12,14 por ciento en términos globales y, en términos relativos, en relación a la población afiliada, ha descendido un 14 por ciento, de modo que es Extremadura es la tercera comunidad autónoma con un menor índice.

El objetivo del encuentro de hoy es analizar entre todas las partes representadas en la Comisión -administración, sindicatos y patronal- la situación actual, evaluar el Plan de Actuación de Prevención de Riesgos Laborales "y ver entre todos qué medidas podemos tomar para seguir avanzando", ha señalado Lucio.

"No hemos bajado la guardia, pero es posible que podamos reconducir las acciones en marcha", ha indicado la consejera al ser preguntada por la petición sindical de que se incremente la labor inspectora.

A este respecto, ha precisado que se este año la Inspección de Trabajo ha realizado 911 actuaciones más respecto al mismo periodo de 2009, hasta llegar a un total de 7.840, divididas en 2.490 órdenes de servicio, 1.460 visitas, 2.960 requerimientos y 19 paralizaciones.

A esta cifra se suman las 2.638 visitas a empresas -la mayoría en el sector de la construcción- que han realizado los técnicos del Centro Extremeño de Seguridad y Salud Laboral.

Según Lucio, "no se trata de más inspección", sino de sensibilizar tanto a empresarios como trabajadores porque "no podemos poner un inspector de trabajo detrás de cada trabajador o empresa".

Sobre la visión de los sindicatos de que la crisis económica ha agudizado la precariedad laboral y, por ende, ha mermado la seguridad, ha apuntado que la Junta no puede constatar con los datos esa afirmación.