Un centenar de socios de la cooperativa Caval de Valdelacalzada protesta en Mérida ante la orden de embargo dictada por la Asesoría Seasa, propiedad del antiguo gerente de la cooperativa, Manuel García González, sobre tres socios por el impago del seguro agrario del ejercicio 2009.

Según recoge la agencia Efe, la marcha, compuesta fundamentalmente por las mujeres de los socios, se han desplazado desde el Puente Romano de Mérida hasta las puertas de la citada asesoría, en la calle Graciano.

María Lozano, una de las manifestantes, resalta que la mayoría de los agricultores de la cooperativa hortofrutícola tenían contratados sus seguros agrarios en Seasa para cubrir posibles daños en la cosecha por las inclemencias metereológicas.

Lozano se cuestiona que la asesoría embargue "por 3.000 euros" después de que los bancos, los proveedores y los socios hayan "perdonado deuda". "Se nos ha hecho un agujero de 28 millones de euros y nos ha costado salir adelante porque ha sido una lucha muy dura".

Al parecer, los tres socios sobre los que pesa la orden de embargo pertenecen a la nueva junta rectora, constituida tras la dimisión de García González, al que ahora investiga la Fiscalía por un presunto delito de falsedad documental y fraude.

Carmen Rodríguez, por su parte, explica que algunos socios pagaban el seguro a final de año, una vez que les había pagado la cooperativa, pero que, tras dos años sin cobrar, no podían hacer frente al gasto "más mínimo".

Las mujeres convocan la protesta ante la "impotencia" de ver al "responsable paseando tranquilamente" por Valdelacalzada, localidad que, en su opinión, ha dado una "lección de civismo". "Hacía auditorías y las metía debajo", subraya Rodríguez en alusión al ex gerente, a quien recrimina su actitud por no avisar a los socios y permitir que "la bola se hiciera más grande".

Además, se muestran indignadas por haber confiado en una persona "que ha sido un dios de barro", pero a la vez "esperanzadas" ante la posibilidad de cobrar.