Dicen que es la cuna de Logrosán, que hace miles de años habitaron allí los primitivos logrosaneros y que existen multitud de vestigios que acreditan el paso de diversas culturas por ese enclave de Extremadura. Pero esos vestigios están sin excavar, sin catalogar y sin investigar, pese a que podrían suponer un importante impulso para el turismo en la comarca si se ponen en valor --explican en el municipio--. Se trata del cerro de San Cristobal, una formación rocosa que alcanza los 700 metros de altura y que, tras permanecer en manos privadas durante los últimos siglos, puede convertirse en propiedad pública en los próximos meses. La operación está en marcha y la llave la tienen... los rayos del sol.
La compañía eléctrica Abengoa está negociando la adquisición de los últimos terrenos privados que quedan en la sierra de San Cristobal. Ya ha alcanzado un acuerdo con uno de los tres propietarios actuales del enclave y se mantienen conversaciones con los otros dos. El objetivo de la empresa es hacerse con esta superficie --más de 220 hectáreas-- y después cederla al Ayuntamiento de Logrosán. De esta forma, la sierra de San Cristobal sería totalmente pública y el consistorio podría ejecutar los distintos proyectos que está preparando para la puesta en valor del entorno.
La clave de la operación está en las cuatro centrales termosolares que Abengoa está construyendo en el término municipal de esta localidad cacereña. La Ley del Suelo exige a los promotores el pago de un canon por los terrenos transformados y el consistorio ha alcanzado un acuerdo con la compañía eléctrica para que parte de ese canon se salde a través de la compra y posterior cesión de la Sierra de San Cristobal. La alcaldesa, Isabel Villa, confía en que en unos meses todo esté resuelto y el cerro pase a manos municipales. "Podremos decir que la sierra es del pueblo y cuidaremos, protegeremos y pondremos en valor todo el patrimonio que alberga para que sea una visita obligada en Extremadura", señala la regidora.
Importante valor geológico
Prueba del potencial turístico de la sierra de San Cristobal es que se trata de uno de los puntos de interés geológico del Geoparque Villuercas-Ibores-Jara --los geoparques son espacios naturales que destacan por su importancia científica, desde el punto de vista geológico, arqueológico, ecológico y cultural--. Se formó hace 300 millones de años y, además de los vestigios arqueológicos, tiene importantes recursos naturales, como las formaciones minerales de cristales de casiterita, cuarzo o turmalina, e recursos etnológicos como sus minas de estaño. El objetivo del ayuntamiento es que el cerro, un batolito de origen granítico, se convierta y consolide como uno de los principales atractivos turísticos, culturales y de recreo del municipio y la comarca.
