Apenas 851 mujeres que ejercen en la comunidad como cuidadoras no profesionales de personas dependientes están dadas de altas en la Seguridad Social. Y eso, a pesar de que desde el pasado marzo el Estado se hace cargo de las cotizaciones, después de que el Gobierno de Pedro Sánchez recuperara este derecho eliminado en 2012.

Esto supone que en la región solo el 13% de las cuidadoras no profesionales cotizan, lo que les ayudaría a acceder a una pensión cuando se jubilen. Sin embargo, siguen siendo una minoría. A fecha 30 de noviembre, último dato disponible en el Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia, en Extremadura hay más de 6.500 personas que perciben una prestación económica para cuidados en el entorno familiar, pero solo 851 de las cuidadoras (porque la mayoría son mujeres de entre 50 y 60 años) están afiliadas a la Seguridad Social.

No obstante, en los últimos ocho meses, desde que entró en vigor el real decreto ley 6/2019 que recupera este derecho, se ha incrementado el número de cotizantes, ya que a principios de año constaban en la región 160 cuidadoras no profesionales afiliadas a la Seguridad Social que pagaban ellas mismas sus cotizaciones desde que en el 2012 el Estado dejó de hacerse cargo. Eso provocó que la gran mayoría (había 4.733 cuidadores dados de alta en junio de 2012) dejaran de cotizar y se dieran de baja.

Entre las razones que pueden explicar el poco tirón de las cotizaciones una vez recuperado el pago por parte del Estado está la falta de información. «La mayoría de las comunidades no han hecho una gran campaña de comunicación para informar a las cuidadoras de que tienen este derecho y de lo sencillos que son los trámites para poder beneficiarse», señala José Manuel Ramírez, presidente de la Asociación de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales, que apunta también a que Extremadura tiene un gran porcentaje de prestaciones vinculadas al servicio (más del 44% del total de las prestaciones de dependencia concedidas) y menos de cuidadores en el entorno familiar (el 20% del total).

Luego hay otra razón, y es que no todas puedes beneficiarse porque el cuidador no puede estar dado de alta en ningún otro régimen de la Seguridad Social a tiempo completo ni cobrar prestaciones por desempleo o pensiones. Aún así, se calcula que, de las 6.500 prestaciones actuales, unas 3.000 extremeñas podrían estar dadas de alta gracias al Estado, por lo que aún teniendo en cuenta esos requisitos mínimos la cifra todavía es muy inferior respecto a las beneficiarias potenciales.

De esta forma, Extremadura se sitúa en la media nacional, mientras Cataluña (6%), Baleares (6%), Madrid (9,8%) son las comunidades con menor proporción de convenios especiales de cuidadores no profesionales. En el lado contrario están País Vasco (23%), Galicia (22%), Asturias (20,6%).