El suroeste de Madrid es la puerta de entrada desde Extremadura a la capital de España y ha sido tradicionalmente el lugar de asentamiento de los miles de extremeños que han emigrado allí, desde los años 50 y 60 hasta la actualidad. Hoy, esos barrios ocupan las primeras páginas y las aperturas de los informativos por la decisión del Gobierno regional de la Comunidad de Madrid de confinar varias zonas, tanto en distritos de Madrid como en algunos municipios de la comunidad. Este periódico ha explorado en los datos del padrón y del Instituto Nacional de Estadística para calcular a cuántos extremeños les afectan estas restricciones.

Madrid capital

Son 31.443 los extremeños que viven en barrios con restricciones en Madrid capital. De acuerdo a los datos del padrón del Ayuntamiento de Madrid son 7.331 en Carabanchel, 7.311 en Puente de Vallecas, 5.536 en Villaverde, 4.480 en Ciudad Lineal, 3.953 en Usera y 2.832 en Villa de Vallecas. Cabe destacar que dentro de estos distritos las restricciones se aplican por zonas de salud (un total de 26).

«Es algo muy raro porque estás en una zona confinada pero cruzas la calle o giras la esquina y ya no», explica Cruz Planchuelo, un extremeño originario de Zarza de Granadilla que residen en el barrio de Carabanchel desde los años 60. Pero a pesar de llevar décadas viviendo en la capital, Planchuelo no recuerda una situación igual: «Hace un par de días fui a hacerme una resonancia al 12 de Octubre (se refiere al Hospital) y era como una película fantasmagórica. No se veía a nadie», cuenta.

Planchuelo cree que, en general, la gente del barrio sigue las normas, aunque reconoce que el peligro está en las reuniones familiares y de amigos: «Lo peligroso es juntarse mucha gente porque además es como ‘venga, aquí no pasa nada’», advierte. De hecho, Planchuelo relata cómo en la Casa Extremeña de Carabanchel han restringido las actividades: «Lo único que hemos hecho últimamente es la misa de la patrona, de Guadalupe. En la iglesia del barrio y con todas las medidas y la distancia», detalla.

«Así que yo creo que la gente está haciendo caso a los que nos mandan, otra cosa son las peleas de los políticos», argumenta. «Esto del coronavirus ha sido que si decían, que si no sabían, que si suponían, como es una cosa desconocida, pues qué se va a decir», añade.

Y con la experiencia que le han dado los años este extremeño en Carabanchel advierte: «Lo importante es llevar la mascarilla y paciencia hasta que llegue la vacuna».

Las restricciones de la comunidad no sólo se dan en la capital, sino que también afectan a otros seis municipios de la región, en los que hay una importante bolsa de población extremeña. Prueba de ello es Fuenlabrada, donde se asientan 10.918 extremeños. A este municipio se suman los de Getafe -9.584-, Alcobendas -3.454 extremeños -, Parla -4.701- y San Sebastián de los Reyes -2.848. Se deben añadir los municipios de Humanes de Madrid y Moraleja de Enmedio en cuyos padrones no consta la procedencia regional de sus vecinos.

En toda la Comunidad de Madrid hay 197.292 extremeños, una cifra de población que supera a la de todas las ciudades extremeñas. Un cuarto de ellos (53.364) se encuentran en las zonas restringidas. Si estuvieran en Extremadura, serían la cuarta ciudad en número de habitantes. La diáspora extremeña en Madrid confinada, la cual se prevé que aumente mañana o el lunes con la ampliación de zonas con movilidad restringida que se anuncia desde el Gobierno madrileño.