Los hogares extremeños volverán a incrementar sus gastos durante este 2007, pero lo harán a un ritmo menor que en años precedentes. Esas son las previsiones del servicio de estudios de Caixa Catalunya, que justifica esta ralentización del incremento del gasto familiar a través de la escalada de los tipos de interés --que bajo su punto de vista aumenta el atractivo del ahorro y endurece las condiciones de las operaciones de financiación (préstamos, hipotecas...)-- y por la desaceleración de los precios en el mercado de la vivienda.

Según las estimaciones de esta entidad financiera, los hogares extremeños gastarán este año un 3,4% más que en el 2006. Esto, traducido a valor contable, supone un incremento de 291 euros por cada integrante de la unidad familiar. Así, un hogar medio de cuatro personas verá como el gasto familiar se dispara en doce meses en poco más de 1.100 euros, hasta situarse en 35.420 euros anuales.

Este incremento es sin embargo mucho menor que el producido durante el 2006 (4,5%) y coincide con el registrado a nivel nacional, mientras que en los últimos años la subida siempre había sido mayor en la región que en el conjunto del país. Según los responsables del informe, "la mayoría de comunidades autónomas mostrarán una desaceleración de una o dos décimas en la tasa de avance interanual del consumo privado".

LIGERA SUBIDA DEL IPC Desde Caixa Catalunya apunta que la subida del gasto familiar seguirá apoyándose en pilares como el dinamismo del mercado de trabajo. "El crecimiento de la ocupación continuará avanzando a buen ritmo, se mantiene el peso de los asalariados por encima del 80% y, dentro de estos, la contratación indefinida se acelerará", explican. También contribuirá a ello la relajación del IPC, que según las previsiones de esta entidad financiera se quedará a finales del 2007 en un incremento del 1,7% en los precios de la cesta de la compra --la menor subida del país y muy por debajo de la tasa del 2006 (3%)--.

Por contra, la desaceleración del mercado inmobiliario beneficiará a las familias extremeñas en concreto y a las españolas en general. El metro cuadrado de vivienda nueva en la región se incrementará este año apenas un 3,1%, lo que supondrá la menor subida no solo del país, sino también de la última década --durante el 2006 subió un 4,9% y en el 2005, un 9%--. De esta forma, a finales de año el coste del metro cuadrado en Extremadura se situará en 1.033 euros, 34 más que al concluir el 2006.

De esta forma, la comunidad autónoma seguirá teniendo los precios más bajos del mercado inmobiliario español, pero también es cierto que se continúa batiendo récords. De cumplirse estas previsiones, en diciembre un piso medio de 100 metros cuadrados costará 103.300 euros, casi el doble que hace siete años (en el 2000 esa misma vivienda costaba 53.700 euros).

Asimismo influirán en la moderación del gasto de los hogares extremeños, de acuerdo con las estimaciones realizadas por los servicios de Caixa Catalunya, las sucesivas subidas de los tipos de interés llevadas a cabo por parte del Banco Central Europeo durante todo el 2006, así como las que realice este año. Esto ha endurecido y endurecerá las condiciones de los créditos financieros, es decir, que las hipotecas y los préstamos --por ejemplo-- serán más caros. Esta circunstancia "fomentará" el ahorro y desincentiva el incremento del consumo de los hogares tanto a nivel regional como en el conjunto de todo el país.