Deberían pedir disculpas quienes ignoran a la figura de Hernán Cortés. Con esta rotundidad zanjó Ramón Tamames, miembro de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas Ramón Tamames, la polémica surgida tras la petición del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, al rey de España de excusas por la conquista de América.
El economista clausuró ayer en Trujillo el congreso internacional sobre Hernán Cortés con la ponencia Hernán Cortés en el siglo XXI. V centenario de la llegada de Cortés a México. En declaraciones a Efe, el académico lamentó que en la clausura del congreso no haya nadie representando a las administraciones regionales y estatales, y que el Gobierno de España no celebre «para nada este centenario, algo increíble. Aquí tendría que estar el ministro de Cultura, incluso el propio rey».
En su opinión, Cortés en España cuenta pocos enemigos, pero tiene «muchos ignorantes que no saben realmente del Cortés estadista, colonizador, evangelizador, defensor de las lenguas locales, introductor del español, de la primera imprenta, y no se difunde».
Además, afirmó que habría que aprovechar la segunda parte de la carta del presidente de México, que propone un acuerdo para la concordia hispánica de los dos países y la normalización en ese aspecto de las relaciones, por lo que aboga por la reunión de historiadores de ambas partes para realizar un manifiesto de concordia.
Tamames en su obra sobre el conquistador extremeño cita a mexicanos como Vasconcelos, que habla de Cortés como el padre de la nacionalidad mexicana, y a Miralles, que lo reconoce como «inventor de México». Subrayó que este personaje histórico fue polifacético, un gran empresario, hombre de negocios, que buscó la relación económica con China, soldado «valiente y estratega». También resaltó que otros hablan de él como el creador de la nación mexicana hasta entonces inexistente y el «símbolo internacional en muchos aspectos» de este país americano, del que Cortés quedó enamorado, un «conquistador conquistado».
«Hubo 64 virreyes en 300 años, uno cada cinco años, había una cierta estabilidad política, y en los primeros 30 años de México hubo más de 50 gobiernos. México tardó mucho en recuperarse y desde luego el México que dejó España con cinco millones de kilómetros cuadrados se redujo a dos millones por la presión norteamericana».
A su juicio, los indios fueron tratados mejor en esa época que en otras partes del mundo y España creó más universidades allí que «todos los países juntos» de esa zona. Así, para Tamames, la leyenda negra está ya «muy desprestigiada» sobre todo la parte del genocidio por los españoles, que ha quedado derrumbada con la idea del colapso demográfico, que hubo también en Estados Unidos y otros lugares. Apostilló que lo que hubo fue una «invasión microbiana y bacteriológica con enfermedades como el tifus o la viruela».
