Apenas 170 extremeños están autorizados a guardar en sus casas una pistola o un revólver para su autodefensa. Lo reducido de la cifra tiene su origen en que, para poder acceder al uso y tenencia de esta clase de armas, es necesario obtener una licencia, la de tipo B, cuya concesión está muy restringida.

El Reglamento de Armas aborda esta cuestión de una forma bastante genérica: "La licencia de armas B solamente podrá ser expedida a quienes tengan necesidad de obtenerla". Eso sí, teniendo siempre en cuenta que "la razón de defensa de personas o bienes, por sí sola, no justifica la concesión". En la práctica, fuentes de la Guardia Civil explican que las autorizaciones se otorgan a personas amenazadas de manera directa y a aquellos que desarrollan actividades profesionales de riesgo, como escoltas, joyeros o representantes de joyería y piedras preciosas, si bien matizan que "no se le va a dar únicamente por el hecho de ser joyero. Tiene que argumentar su necesidad. Por ejemplo, que tenga que hacer muchos traslados portando cantidades elevadas de dinero".

Además del informe de aptitudes psicofísicas y del certificado de antecedentes penales, que también se piden en el caso de las licencias para armas de caza, en las peticiones para poseer pistolas y revólveres hay que adjuntar un escrito en el que se argumenten los motivos por los que se solicita y en el que se incluya cualquier dato o circunstancia que justifique la necesidad requerida. "Los requisitos se han endurecido, cada vez se exige más", indican en la Benemérita. De hecho, según el último Anuario Estadístico del Ministerio del Interior, del 2005, del alrededor de dos millones de licencias concedidas en España, apenas algo más de 11.000 eran de esta clase.

Una vez recibidas las peticiones en la intervención de armas, éstas se remiten a la respectiva Delegación del Gobierno, que elabora un informe que sirve de base para que la Dirección General de la Guardia Civil dé o no el visto bueno. Si se aprueba, tendrá una vigencia de tres años, y permitirá la tenencia de un único arma.

Quienes son partidarios de que todo ciudadano tenga derecho a procurarse su propia defensa no están muy de acuerdo con tanta exigencia. Basta darse una vuelta por los foros de internet que tocan estos temas para comprobarlo. "La licencia B hoy en día es como un empleo fijo, dicen que existe, pero nadie conoce a ciencia cierta algún poseedor", comenta un internauta, mientras que otro reflexiona: "Si tu mercancía vale dinero, puedes protegerte. Si quieres defender a tu hijo pequeño, llama al 091. De locos".

Claro que alguien da, ironizando, la solución: "Sácate una licencia fiscal de joyero, haz un par de pintadas en tu casa amenazándote, escríbete un par de anónimos y pon cuatrocientas denuncias porque te persigue alguien. Como no te harán ni caso, que te pongan por escrito que eso no es razón suficiente. Después te estampas de cabeza contra una pared, rompes dos cristales de tu casa, denuncias un atraco con agresión y haces lo mismo con el Estado por no haber evitado tu agresión. Así, te darán una pistola".