Casi dos décadas después, el regadío de Monterrubio de la Serena al fin verá la luz, pero el de Tierra de Barros tendrá que seguir esperando. El proyecto para transformar más de 12.000 hectáreas de riego por goteo en la comarca de Almendralejo está pendiente de recibir la calificación de interés nacional por parte del Ministerio de Agricultura, a quien la Junta recurrió en la anterior legislatura para paliar los problemas de financiación que han impedido hasta ahora que sea una realidad.

Este proyecto es de mucha mayor envergadura que el de Monterrubio o el de Villanueva del Fresno (otro nuevo regadío que ya está en ejecución): supondrá una inversión cercana a los 100 millones de euros y afectará a 11 municipios: Almendralejo, Aceuchal, Alange, Villafranca de los Barros, Torremejía, Fuente del Maestre, La Zarza, Solana de los Barros, Ribera del Fresno, Villagonzalo y Mérida.

En el año 2014, con el PP en la Junta de Extremadura, se adaptó el proyecto existente, pues según dijo entonces José Antonio Monago era inviable en el contexto actual, y se dijo que se financiaría con la deuda histórica. Pero esta nunca llegó y con el cambio de gobierno, los socialistas buscaron otras alternativas para su puesta en marcha. Se recurrió al Banco Europeo de Inversiones (BEI), pero la última propuesta pasa por que el Ministerio de Agricultura declare el proyecto de interés nacional para asumir una parte de su financiación. De hecho, la propuesta de la Junta pasa por asumir un 33% del coste total, que otro 33% lo asuma el Estado y el 33% restante, los regantes.

En una visita a la región el pasado enero, el ministrio de Agricultura en funciones, Luis Planas, avanzó que sí dará el interés nacional al proyecto, una declaración que se paralizó por la convocatoria de elecciones nacionales y el posterior contexto.