Todos los habitantes de Villarta de los Montes, la localidad pacense que desde ayer se encuentra en aislamiento social, serán sometidos entre mañana y el martes a pruebas de PCR para controlar la incidencia real de la infección en este municipio de la Siberia Extremeña de poco más de 400 habitantes.

El alcalde de la localidad, Antonio Chaves, ha hecho este anuncio, en declaraciones a Efe, y ha reconocido que la situación es "complicada" en esta pequeña localidad en la que ya se contabilizan 38 positivos confirmados por PCR, uno más que ayer, y hay más de 70 contactos rastreados.

La primera mujer contagiada, una anciana de unos 80 años, permanece ingresada y su situación es estable, según Chaves.

Tal y como ha explicado el alcalde, ayer por la tarde la Guardia Civil montó ya el operativo de aislamiento del pueblo, al que solo se prodrá salir o entrar en caso de necesidad jusitificada.

Se ha permitido a los veraneantes que estaban en el pueblo volver a su residencia habitual, mayoritariamente Madrid, aunque, según Antonio Chaves, ya muchos se habían ido a lo largo de esta semana ante las informaciones que circulaban sobre la posibilidad de que la localidad fuese aislada, como así ha ocurrido.

La mayor parte de los contagiados actualmente son de mediana edad, pero el primer edil muestra su preocupación y "zozobra" ante el hecho de que el virus haya podido llegar a la población más mayor, ante los riesgos que corren y mayoritaria en la localidad, lo que se conocerá cuando se tengan los resultados PCR.

El Ayuntamiento ha pedido ya ayuda a Protección Civil para que se monte un dispositivo en la localidad que permita atender los requerimientos y necesidades de sus vecinos más mayores, sobre todo si estos viven solos.

El verano "empezó mal" con la suspensión de las fiestas debido a la pandemia, pero esto ha sido "un temblor de tierra", según el alcalde, quien explica que aún se desconoce exactamente cómo pudo llegar el virus al pueblo, pues la primera infectada conocida, la persona mayor que está ingresada, prácticamente no salía de casa, aunque se sospecha de una visita que recibió y que pudo contagiarla.

Antonio Chaves está convencido de que sus vecinos cumplirán con todo lo establecido para tratar de frenar la expansión del virus y ha dicho que aunque la mayoría no sale ni siquiera a tomar el fresco por las noches a las puertas de sus casas, como es costumbre en estos pueblos, ha recomendado que si lo hacen, estén con mascarilla y guarden las distancias de seguridad.