Los trabajadores de la empresa Lusográfica de Olivenza continuarán su encierro --lo hacen desde el pasado martes-- en las instalaciones de la planta hasta que no se resuelva su situación, ya que desconocen cuál será su futuro, si la empresa se va a vender o la planta se va a cerrar. Así lo manifestó ayer el secretario regional de la Federación de Comunicación y Transportes de CCOO, Luis Cortés, tras comprobar como ningún representante de la empresa se presentó ayer al acto de conciliación acordado por ambas partes en la Fundación de Relaciones Laborales de Extremadura en Mérida. Este encuentro para buscar una salida a la situación de 47 trabajadores afectados se ha pospuesto para el 20 de febrero.

Para Cortés esta actuación por parte de la empresa supone "alargar la situación y no atenerse a los compromisos adquiridos", e insta a la empresa a que explique "qué piensa hacer" con la imprenta gráfica de Olivenza.

Por otro lado, el PP extremeño pidió ayer la comparecencia urgente en la Asamblea de la vicepresidenta y consejera de Económica, María Dolores Aguilar, para que explique cuál es la situación de Lusográfica y denunció que Lusográfica ha recibido en sus cinco años de existencia 13,3 millones en ayudas públicas, la mitad de la Junta.