La firma griega Metka y Solventia, promotora y una de las subcontratas de la planta fotovoltaica que se está construyendo en la localidad cacereña de Talaván, respectivamente, llegaron a un acuerdo la tarde-noche del pasado miércoles para rescindir su relación contractual.

Este pacto ha permitido a su vez que Metka asuma la deuda que la división de renovables de Solventia mantenía con sus empleados —algunos de ellos han estado hasta tres meses sin cobrar—, que dejan también de estar dados de alta con esta sociedad.

«Estamos muy satisfechos de que se haya firmado la salida total de Solventia con Metka, lo que supone que con fecha 28 de enero del 2020 estamos ya despedidos y podemos solicitar la prestación por desempleo o trabajar en otras empresas», comunicó ayer Raúl Canillar, portavoz de estos trabajadores.

De esta forma, la promotora abonará los entre dos y cuatro mil euros, aproximadamente, que se debían a cada uno de estos 116 profesionales, importe que desembolsará distribuido en cuatro plazos, de forma que la previsión es que para abril próximo la deuda esté liquidada ya por completo.

SEGUIR EN LAS OBRAS / Igualmente, Metka dará facilidades para que este centenar de personas pueda irse incorporando a las obras de la planta solar de Talaván trabajando en otras empresas y manteniendo «las mismas condiciones» laborales que tenían en Solventia, destacó Canillar, que mostró su «agradecimiento» a la compañía por este compromiso y por haber asumido la deuda que había acumulado su subcontrata.