Entre el 6 y el 19 de julio, la Dirección General de Tráfico iniciará una nueva Campaña de Control de la Tasa de Alcoholemia entre los conductores de todas las carreteras extremeñas, con el fin de reducir el número de víctimas como consecuencia de los accidentes de circulación. Se realizarán más de 200 controles a más de 10.000 conductores, con la ayuda de 882 agentes.

En los últimos años, se ha producido en Extremadura un descenso en el número de pruebas de alcoholemia con resultados positivos, lo que indica un incremento de la concienciación de los conductores respecto al consumo de alcohol.

Durante al año 2006 se realizaron un total de 69.237 pruebas de alcoholemia, de las que 1.669 dieron resultado positivo (2,41% del total de las pruebas). En el 2007, 77.599 pruebas de alcoholemia fueron llevadas a cabo, de las cuales 1.531 dieron positivas (1,97%). El pasado año, la Guardia Civil de Tráfico en Extremadura incrementó un 30% las pruebas de alcohol, alcanzando las 100.379, de las que 1.508 obtuvieron resultado positivo (1,50%), 23 menos en número absoluto que en el año anterior. Aún así, a lo largo de 2008 se detectó el consumo de alcohol como causa probable de 163 accidentes en las carreteras de Extremadura.

Esta campaña supone una intensificación de la actividad habitual de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil de Extremadura y persigue evitar el consumo de alcohol por parte de los conductores ahora que comienzan las fiestas estivales en numerosas localidades de la región. Desde la Dirección General de Tráfico se insiste en la recomendación de no conducir si se ha comsumido alcohol.

Menos son muchos dice el lema de la DGT, por lo que, aunque haya habido una disminución en los resultados positivos de alcoholemia, la vigilancia sobre este tipo de comportamientos de riesgo sigue en aumento permanente.