Los transportistas han dado por zanjada súbitamente la polémica sobre la adaptación de los autobuses de transporte escolar a las normas de seguridad que se exigen a partir de este curso (puertas automáticas, limitador de velocidad...). Tras reunirse el pasado lunes --en un encuentro del que la Junta no ha informado oficialmente-- con la consejera de Educación, el presidente de la Asociación Regional de Transporte Escolar de Extremadura (Artex), Hipólito Ruiz Tena, declaró ayer a este diario que "el curso comenzará sin incidentes en el transporte de los alumnos".

Así, aunque sin dar una explicación concreta, el representante de los transportistas extremeños rechazó que pueda haber rutas escolares que queden sin cubrirse por la falta de vehículos adaptados a la legislación (en vigor plenamente este curso) como había señalado días antes.

No obstante, empresarios del sector confirman la sospecha, latente en el mismo, de que puede haber vehículos que aún no cumplen los nuevos requisitos. "Se escuchan comentarios sobre autocares que no van a adaptarse (aunque el plazo ya ha terminado), porque las exigencias son muchas y muy costosas. Solo el limitador de velocidad cuesta 800 euros", explicaba ayer la gerente de una de estas empresas.

Pero contar con todos los dispositivos es imprescindible para dedicarse al transporte escolar. Sin la documentación (tarjeta de la ITV) actualizada, los transportistas se arriesgan a una sanción y la inmovilización del vehículo, por lo que difícilmente, según el presidente de Artex, "ningún conductor va a atreverse a hacer algo así, sino que seguramente optarán por usar únicamente los vehículos que tengan preparados hasta que consigan renovar toda su flota".

En ese sentido, Ruiz Tena sí que señala de nuevo que en Extremadura "aún hay autobuses escolares que no cumplen las nuevas normas". De hecho, ayer mismo algunos de ellos "se sometían a los últimos retoques para adaptarse", comentaba otra empresaria extremeña.