No podía ser de otra manera: la Asamblea celebró ayer el primer pleno del periodo de sesiones con el tren como protagonista. Un día después de acordarse la celebración de una gran manifestación en Madrid, PSOE, PP, Podemos y Ciudadanos (Cs) hicieron visible su unión para reclamar un ferrocarril digno, aunque sin renunciar al cruce de acusaciones.

Todos se pusieron de acuerdo para sacar adelante una propuesta de la formación morada que pide al Gobierno la reapertura del tren Ruta de la Plata y la inclusión del trazado Plasencia-Astorga en la Red Básica Ferroviaria Transeuropea (se definirá en 2023 para entrar en servicio en 2030), pero los reproches estuvieron presentes casi desde el comienzo de la sesión.

El primer rifirrafe lo protagonizaron el diputado del PP José Antonio Echávarri y el socialista Andrés Moriano en el debate sobre la estrategia de industrialización de Extremadura. El popular afeó al consejero de Economía, José Luis Navarro, que tras dos años de gobierno aún estén en fase de actualizar la estrategia industrial que elaboró el Ejecutivo de José Antonio Monago y le instó a concretar y ponerla en práctica cuanto antes, pues a pesar de la «trenitis aguda» que el PSOE tiene en esta legislatura el principal problema de la región sigue siendo el paro.

Moriano no tardó en recordar a Echávarri que también el PP se ha sumado a la reivindicación por un ferrocarril digno y además quiso dejar claro que la manifestación del próximo 18 de noviembre no será un acto «lúdico-festivo» como el diputado Víctor del Moral aseguró el miércoles para justificar la presencia del PP.

«Ya hemos visto en Atocha que los disfraces llaman la atención, pero no confundamos el norte. Espero que no se les ocurra ir disfrazados del señor de la escoba del trenecito del miedo. Se han sumado a esta movilización y háganlo con entera responsabilidad, porque es sinónimo de empleo y oportunidad», dijo Moriano a la bancada popular.

Más tarde, ya en el debate de la propuesta de Podemos sobre la línea Ruta de la Plata, el diputado Víctor del Moral se defendió. «Aquí el único tren de la escoba fue el que el señor Pepiño Blanco (José Blanco, exministro socialista de Fomento) cerró a los extremeños con el Eje 16», aseguró para después recordar que fue también un gobierno socialista quien prometió a los extremeños un AVE en el 2010.

tras 30 años / «Llevan 30 años maltratando el tren por opción u omisión, cerrando líneas e incumpliendo los presupuestos del Estado, que en materia ferroviaria han sido papel mojado cuando ha gobernado el PSOE», continuó Del Moral, que comparó la situación actual del tren en Extremadura con las inversiones «millonarias y sin restricciones» del AVE Madrid-Sevilla en 1995. «Ningún socialista entonces convocó a la sociedad civil», dijo.

En la misma línea, los diputados de Podemos afearon a los socialistas que tras 30 años de gobierno vengan a pedir ahora un tren digno, aunque también recordando que los incumplimientos en esta materia han venido tanto del PSOE como del PP. «No es momento de reproches ni de fustigarse porque no se consigue nada, pero las soluciones hay que ponerlas con gestos y pedir perdón podría ser un gesto que hubiera estado a la altura del mapa que ha enseñado», dijo la diputada Jara Romero al socialista Francisco Manuel García Blázquez. Este mostró en la tribuna una imagen de las líneas de alta velocidad y larga distancia (ninguna cruza la región) para reiterar que los extremeños «no podemos consentir esta discriminación».

Finalmente, pese al cruce de reproches primó la unidad y los cuatro grupos lograron ponerse de acuerdo y aprobar la propuesta de Podemos para la reapertura de la línea Plasencia-Astorga. PSOE, PP y Cs habían presentado enmiendas, pero finalmente todas se recogieron en una única transaccional.