La Universidad de Extremadura (UEx) ha iniciado hoy un curso de verano que, bajo el título de "Brasil, el coloso de la lusofonía. Cultura y negocios", analiza la realidad del país latinoamericano y la apertura de relaciones comerciales desde la región.

El curso, que se desarrollará hasta el 24 de julio, ha sido inaugurado hoy en la Facultad de Económicas y Empresariales por el consejero de Administración Pública del Gobierno de Extremadura, Pedro Tomás Nevado-Batalla.

En el transcurso de las jornadas se abordarán los retos y oportunidades del negocio asegurador en Brasil, así como los modelos y prácticas políticas, las especificidades de la regulación contable y la representación cartográfica de Brasil y de América en los inicios del siglo XVI, entre otros temas, como las armadas y flotas en los años 1500 y 1825.

Según ha destacado el consejero, ha sido un "acierto" por parte de la Uex desarrollar este curso en Badajoz, ya que es una ciudad que ejerce de "puente entre España y Portugal y toda la parte lusófona desde el punto de los negocios y cultural".

Para el alcalde de Badajoz, Francisco Javier Fragoso, esta ciudad se pone "a disposición de Extremadura para hacer de puente con la lusofonía" y, a su juicio, ya es vista como "algo propio" en el país vecino.

En la relación de España con Brasil tendrá gran importancia el puerto de aguas profundas de Sines, ubicado en el sur de Lisboa, según ha apuntado. No obstante, ha precisado que en este seminario se viene a hablar también de cultura, con el fin de estrechar los lazos que históricamente han existido.

Para el director del curso y profesor de la UEx, Fernando Serrano Mangas, viene a hacer un repaso por los tiempos de la colonia portuguesa y la época de la independencia, para adentrarse después en el mundo financiero, así como en los caminos que hay para establecer para entablar relaciones comerciales.

Según ha cifrado, Brasil es la sexta economía del mundo en relación con el PIB del país y cuenta con 200 millones de personas con un nivel adquisitivo aceptable, lo que supone, junto a México, con 120 millones de habitantes, un mercado atractivo para España.

Además, ha añadido que desde el sector agroalimentario extremeño se están estableciendo relaciones con Brasil, pero también desde otros, como el de las nuevas tecnologías y la informática.