Tan importante es conocer si una persona tiene el covid-19 como los detalles del virus que está detrás del contagio. En todos los casos es el SARS-CoV2, pero en los últimos meses se están detectando mutaciones, que está generando nuevas variantes o cepas susceptibles de transmitirse más rápidamente o ser más graves.

Por eso, conocer qué cepa hay detrás de cada contagio (ahora mismo a las autoridades sanitarias les preocupan la variante británica, la sudafricana y la brasileña) es una información muy valiosa para intentar contener su propagación. Y esa información se podrá obtener pronto de forma rápida y sencilla gracias a una investigación desarrollada en la Universidad de Extremadura (UEx). Ocho investigadores, pertenecientes al grupo Configuración de Sistemas Moleculares y Celulares, han desarrollado en dos meses una técnica que permite determinar las tres variantes principales del SARS-CoV2 con una prueba PCR y en solo una hora. Es un trabajo de investigación puntero, cuyos resultados ya están transferidos a una empresa (Biomedal) que se va a encargar próximamente de comercializar test con este método desarrollado en la UEx.

«El principio de la técnica es el mismo que se usa para detectar el covid actualmente, lo único que también permite discriminar la variante presente en una muestra positiva», explica a este diario el investigador y promotor del trabajo, José María Carvajal. Y no es necesario recoger nuevas muestras en los pacientes para determinar de qué variante está contagiado, sino que la misma muestra nasofaríngea tomada para la detección del covid pasa en el laboratorio por otro PCR diferente que permite conocer la mutación concreta. Es una alternativa más rápida y menos costosa a la secuenciación genómica del virus, una tecnología que se está empleando en la actualidad para conocer y descifrar la información imprescindible para su desarrollo y funcionamiento. «En Extremadura hay muchas máquinas que permiten hacer PCR, pero muy pocos secuenciadores», detalla.

Dos mutaciones concretas

Carvajal explica que a nivel del paciente no es determinante conocer con qué variante del virus está infectado, pero sí lo es para la toma de decisiones de los gobernantes sobre la salud pública, ya que algunas están demostrando una mayor capacidad de infección. En concreto, la técnica desarrollada permite detectar si una muestra positiva en covid contiene las mutaciones N501Y y E484K, las causantes de las variantes británica, brasileña y sudafricana, las tres que más preocupan. Pero, además, la técnica se podría ampliar a otras mutaciones futuras. Y no solo se habla de pacientes, esta metodología también puede aplicarse en muestras recogidas en las aguas residuales.

Este grupo científico de la UEx ha desarrollado el trabajo de forma paralela a otra investigación sobre el covid que está llevando a cabo con la financiación del Instituto Carlos III, del Ministerio de Sanidad, y que está a punto de concluir. En este otro trabajo tratan de explicar cómo entra y sale el virus de las células.

Y más allá del coronavirus, el grupo continúa desarrollando investigaciones sobre el sistema respiratorio. «Es satisfactorio poder contribuir con nuestro trabajo en esta situación, pero nos gusta trabajar tanto en la investigación básica, que sabemos hacer bastante bien, como en la investigación aplicada en la medida de lo posible», concluye.