Un grupo de estudiosos de Torremolinos ha descubierto restos fósiles de dos cocodrilos del Cretácico inferior -110 a 130 millones de años- en el área de Taouz en pleno desierto del Sahara en Marruecos, y contactará con las universidades de Extremadura y Málaga para analizarlos, según informa la agencia Efe. El hallazgo consta de una serie de colmillos de mandíbulas superiores e inferiores de un "pholidosauridae sarcosuchus" de entre ocho y diez centímetros de largo y 2,5 de base. Además, se han encontrado una osteoderma -placa ósea que cubre la espalda de los cocodrilos- de este mismo animal de quince centímetros de longitud y seis de ancho. El director de la expedición, Enrique Prieto, observa que se trata de los fósiles del cocodrilo más grande del Cretácico inferior, que podría medir unos diez metros de longitud y pesar aproximadamente unas seis toneladas. "Estos cocodrilos habitaban en los mares de aguas someras que en esta época ocupaban el actual desierto del Sahara, en una región poblada por diferentes tipos de dinosaurios como el Carcharodontosaurus Saharicus, el Cetiosaurus o el Deltadromeus Agilis", aclara el científico. El descubrimiento se completa con la parte de un cráneo de un "atoposauridae", que era una especie de cocodriliano enano corredor que podía superar el metro de longitud y que convivía en el espacio y el tiempo con los cocodrilos gigantes del Cretácico inferior. "Es un hallazgo bastante importante debido sobre todo a la cantidad de colmillos descubiertos, al excelente estado de conservación en el que se encuentran y porque no es nada fácil encontrar este tipo de fósil", manifiesta Enrique Prieto. Además, alerta que podría tratarse de un "mesosuquio" de hocico largo -Steneosaurus Bollensis- que vivió también en el Cretácico inferior y con una longitud de entre seis y ocho metros. Estos restos se encontraban a muy poca profundidad en unas pequeñas fosas inundadas en parte por arena, aunque algunos de los colmillos aparecieron directamente en superficie de cantos rocosos. La expedición 'Pholidosaurio Torremolinos-Sahara', dirigida por Enrique Prieto, partió a mediados de marzo hacia Marruecos y estaba compuesta por Sergio López, Leónides Muñoz y Manuel Hoyos. Uno de los objetivos que se marcaba el equipo era la localización, identificación y documentación de un fósil de cocodrilo prehistórico de hace 110 millones de años. Por otro lado, Prieto informa que se pondrá en contacto con la Universidad de Málaga para compartir y estudiar la colección y también con la Universidad de Extremadura con la que ha estado investigando durante cinco años.