Tras tres años de investigación, el grupo Park de la Universidad de Extremadura y Fundesalud han patentado una técnica que puede facilitar el diagnóstico del párkinson. En concreto, el nuevo método que desde hace quince días está al servicio de la sociedad facilita la detección de mutaciones puntuales en el principal gen asociado a la enfermedad, el LRRK2.

Se trata de una nueva herramienta que permite la detección individual, pero también de forma simultánea de hasta doce enfermos, algo novedoso y más orientado al ámbito hospitalario. A diferencia de otras técnicas, ésta además de ahorrar tiempo --se pueden tener resultados en dos horas frente a las 24 horas que necesitan para algunas mutaciones--, es más sencilla y más barata, "porque no requiere de personal especializado como por ejemplo con el método de secuenciación, que es más caro", explica José Manuel Fuentes, investigador y autor principal de esta patente junto a José María Morán.

Para una persona que se sospecha que padece párkinson, la herramienta puede suponer una confirmación dado que esta enfermedad solo se diagnostica por hallazgos clínicos, "es decir, que son los neurólogos en base a su experiencia los que pueden confirmarla, pero no existe una técnica bioquímica certera", señala Fuentes. Pero también puede anticipar el diagnóstico de la enfermedad en personas susceptibles, como los familiares, o no. La técnica permite saber si ese individuo posee las mutaciones del gen en cuestión, pero aclara el investigador: "tener esas mutaciones no significa que se vaya a desarrollar la enfermedad de una forma segura, solo que esa persona tiene más papeletas para tener párkinson, pero puede que ninguna tenga premio", advierte.

Sin duda, un paso más en el diagnóstico de esta enfermedad neurodegenerativa crónica que afecta a unos 5.000 extremeños. Con esta patente se pone fin a tres años de investigación sobre una hipótesis que ha tenido los resultados esperados para sus investigadores, y por ello se muestran muy satisfechos. Ahora una nueva técnica más rápida, barata y sencilla está en el mercado, pero solo el 3% de las patentes se comercializan. "Esto ha surgido en el ámbito de la investigación y lo hemos patentado porque tiene una aplicabilidad, pero no desarrollamos ciencia por términos económicos".

La invento es coparticipado por la Universidad de Extremadura y la Fundación para la Formación y la Investigación de los Profesionales de la Salud en Extremadura (Fundesalud) porque, aunque la investigación se ha desarrollado entre los nueve miembros del grupo Park, el estudio se ha llevado a cabo por algunos proyectos financiados por esta fundación.

NO SOLO GENETICA

Pese a que esta técnica patentada está centrada en las mutaciones del gen LRRK2 (o PARK 8), las que se asocian a día de hoy con más claridad al origen del párkinson desde el punto de vista genético y descubierta en 2004, José Manuel Fuentes señala que no es el único gen que se sospecha que pueda estar implicado en la aparición de esta patología. "De hecho, hay una familia de 15 genes llamados Park, como el grupo de investigación, que pueden estar relacionados". Además, precisa el docente e investigador que en la enfermedad no participa un único factor, sino que hay factores genéticos y medioambientales, que centran otros estudios de los investigadores extremeños, miembros del Centro de Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Neurodegenerativas.