Por problemas técnicos y jurídicos". Numerosas veces recalcó ayer el rector de la Universidad de Extremadura (Uex), Segundo Píriz, que la decisión de no adelantar la paga extraordinaria de junio a los trabajadores de la institución, como la mayoría de los funcionarios que dependen de la administración regional, se debe sobre todo a "nuestras dudas sobre su encaje jurídico, por tener diferentes tipos de trabajadores, que dependen de diversas administraciones...". En segundo lugar situó los "problemas económicos", entre ellos los derivados de la deuda de 20 millones por parte del Gobierno regional. Tras conocerse un comunicado en el que el rector explica las razones de esta decisión, entre los que se incluye la citada deuda, el consejero de Economía y Hacienda, Antonio Fernández, convocó ayer a los medios para explicar que había ofrecido a la Uex inyectar cinco millones para el anticipo de la extra, lo que Píriz admitió, si bien matiza que "no solo se necesita el dinero para esa paga".

Aunque en todo momento destaca que la universidad extremeña está saneada, Píriz admite que tras años de reducciones en su presupuesto --que sitúa en niveles del 2006--, la tesorería está "bastante agotada". Por eso reclama a la Junta una deuda de 20 millones, por dos nóminas atrasadas y otros conceptos, a los que se refería en el comunicado que ha enviado a los empleados de la Uex para explicarles por qué se ha decidido no anticipar la extra.

Fernández admitió el endeudamiento, según dijo de una nómina en la anterior legislatura y otra en la actual, y aseguró que es un mecanismo habitual de financiación de los organismos. "Como la Uex tenía liquidez para hacer frente a ese pago, nos quedamos con ese dinero para financiarnos". Cuando Fernández ofreció ahora cinco millones para la extra, Píriz le respondió reclamándole los 20 pendientes, ante lo que el consejero se ha comprometido a transferir la mitad de ese dinero antes de que finalice este mes.

El rector garantiza que no hay motivos para la preocupación en el pago de las próximas nóminas, si bien da por definitivamente descartado el adelanto de la extra, al que Fernández aún dejaba la puerta abierta, si en la Uex decidían "pensárselo mejor". "No es una cuestión de liquidez, es sobre todo por los problemas técnicos y jurídicos que conlleva", insiste Píriz.