Responsables del Sector Estatal de Ahorro de UGT y de las secciones de este sindicato en Caja Badajoz, Caja Inmaculada (CAI) y Cajacírculo de Burgos se reunieron ayer en Madrid para abordar la decisión tomada el pasado 21 de junio por los consejos de administración de estas tres entidades de poner en marcha un Sistema Institucional de Protección (SIP). Según se explicó desde UGT en un comunicado, tras este encuentro se adoptó la decisión de remitir a los presidentes de las tres cajas "documentos instándoles a que se nos facilite de forma inmediata" un informe de viabilidad del proyecto, datos sobre el impacto laboral que tendrá en las plantillas existentes y, "en su caso, valoración cualitativa, cuantitativa y financiación del mismo".

"Se trata de saber si va a sobrar gente y, si es así, cómo se va a hacer el recorte y de dónde se va a sacar el dinero para pagarlo, porque no se ha acudido al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB)", explicó ayer Rafael Gil, secretario general de la sección sindical de UGT en Caja Badajoz. Este sindicato cuenta con 53 de los 109 representantes sindicales que hay en estas tres cajas, un 48,6% del total. Es la formación más representativa en CAI y Cajacírculo y la segunda en Caja Badajoz.